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Joachim Löw choca con el peso de la historia

En el cargo desde 2006, recientemente renovado hasta 2022, el entrenador elegante y flemático de la 'Mannschaft', Joachim Löw, podría haber ingresado en la historia del fútbol si hubiese ganado dos Mundiales consecutivos.

El técnico alemán de 58 años, campeón mundial en 2014 en Brasil, podría haberse convertido en Rusia en el primer entrenador en ganar dos Copas Mundiales consecutivas desde la Segunda Guerra Mundial. El único que lo hizo antes que él es el italiano Vittorio Pozzo, en 1934 y 1938. Eran otros tiempos, pero este récord se mantiene porque Alemania dejó la Copa del Mundo-2018 en Rusia el miércoles en primera ronda...

Los conocedores del juego habían advertido sobre la dificultad de lograr este hito. "Ganar una segunda Copa del Mundo consecutiva es probablemente lo más difícil que puedas imaginar, y cuando tienes la suerte de ganar una, necesitas mucha hambre y verdadera determinación", dijo a la AFP Jürgen Klinsmann, exjefe de Löw al frente de la selección alemana.

Alemania siempre llegó como mínimo a semifinales en los mundiales desde 2002, y aterrizó en Rusia con el cartel de favorita...

Löw podría haber dejado la selección el 13 de julio de 2014, después de la victoria de su equipo contra Argentina (1-0, tras la prórroga) en la final de la Copa del Mundo en Rio de Janeiro.

El técnico no tenía mucho que demostrar después de poner a Alemania de nuevo en la cima del mundo, 24 años después de su último título en Italia.

Convertido en una estrella en su país, su fama ha traspasado las fronteras del mundo deportivo. Löw es una especie de ícono glamuroso, entre publicidades de cosméticos y atuendos escudriñados, hasta el punto de que el suéter azul con cuello en v que usó durante el Mundial de Sudáfrica-2010 o su camisa ajustada de 2014 se agotaron rápidamente en el país.

También es muy apreciado por la calma que mantiene en todas las circunstancias, incluso después de caer 2-0 ante Corea del Sur, el miércoles en Kazán.

Cuando la cadena de televisión alemana ZDF le preguntó si se quedaría después de la eliminación, dijo en un tono mesurado que era "demasiado pronto" para responder a esta pregunta. "Se necesitan unas horas para ver con claridad, la decepción es muy profunda para mí (...) tendremos reuniones mañana (jueves), veremos cómo continúa", explicó.

Esta calma en todas las circunstancias se ha cristalizado en la gestión de la 'Mannschaft'. Introdujo el yoga en los entrenamientos de la selección. Sin embargo, esta serenidad no le hizo perder el hambre de títulos a "Jogi", apodado así por las sesiones de yoga.

Löw comenzó su carrera de entrenador al frente del Stuttgart, pocos días antes del comienzo de la temporada 1996-97, y ganó la Copa de Alemania antes de llevar al club a la final de la Copa de la UEFA en 1998, perdida ante el Chelsea.

Después confirmó sus dotes de DT en Turquía (tercero en 1999 con el Fenerbahçe) y en Austria (campeón de Austria 2002 con el FC Tirol Innsbrück).

Fue entonces cuando Klinsmann pensó en él en verano de 2004 como su asistente al frente de un equipo alemán en apuros después de caer eliminados en la primera ronda de la Eurocopa-2004, dos años antes de que el país germano organizara el Mundial.

Juntos, y ayudados por la aparición de una generación técnicamente talentosa y menos estereotipada atlética o tácticamente que las anteriores, comenzaron un cambio en la filosofía del juego alemán, que permitió a la 'Mannschaft' terminar tercera en su Mundial de 2006.

Klinsmann se va y la federación le pide a Löw que continúe con el proyecto de juego, que confíe en los jóvenes, pero que también tenga lealtad con los veteranos, algo que le han criticado en Rusia.

La cuestión de la eventual salida del técnico, al que siguen los clubes más importantes, volverá en los próximos días. ¿Permanecerá para liderar a su selección hasta el Mundial-2022 en Qatar?

FUENTE: AFP