El renovado estadio de béisbol Kenny Serracín, ubicado en la provincia de Chiriquí, fue inaugurado este viernes en medio de un espectáculo de fuegos artificiales y artistas en tarima.
La obra cuya inversión alcanza los 19 millones de dólares, cuenta con especificaciones de la Major League Baseball y cuya construcción se ejecutó en dos años, abrió hoy sus puertas con el partido entre Herrera y Chiriquí.
El acto inaugural estuvo presidido por el presidente de la República, Juan Carlos Varela, quien destacó ante los presentes que hoy entrega a los chiricanos, a sus novenas de béisbol y a su fanaticada, una casa digna de sus glorias, a la altura de sus aspiraciones y del tamaño de sus esperanzas.
“Esta obra es de ustedes. No es del Gobierno, no es de ningún partido, es del pueblo chiricano y la construye el Gobierno de la República que presido porque escuchamos el clamor del pueblo de Chiriquí, de sus dirigentes y deportistas, y atendimos a esa voz, pues sabemos que la Voz del pueblo es la voz de Dios”, enfatizó Varela.
Además anunció que Enrique “Kiko” Serracín –hijo de Kenny Serracín y otra de las figuras impulsadoras del proyecto- vivirá en el estadio y para ello recibirá en usufructo una suite en este coliseo. “Él cuidará estas instalaciones, por un salario, y este Estadio será su hogar”.
Cabe señalar que el terreno del renovado estadio de juego es de grama natural, posee sistema de rociadores y drenaje, tablero electrónico, vestidores, dormitorios, áreas de cocina, enfermería, y dopaje, cuartos para árbitros, zonas de ejercicios y oficinas administrativas.
Asimismo cuenta con capacidad para más de 8 mil personas, 300 estacionamientos, ascensores, baños, áreas y acceso para personas con discapacidad, kioscos, cubículo para la prensa y salones de conferencia.
El director de Pandeportes, Mario Pérez, manifestó que “el compromiso de la institución es masificar, desarrollar y dar pasos firmes para que el deporte pueda alcanzar el sitial que tanto se anhela, una tarea exigente, pero que se está cumpliendo y este estadio es prueba de ello”.
FUENTE: Nimay González