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Un duro pasado guía a actores de "The Good Lie"

Emmanuel Jal no pudo llorar en el momento preciso.

Pese a la asistencia de gotas especiales entre bambalinas, el estoico artista de hip hop, activista y actor ocasional tuvo problemas para sacar las lágrimas mientras filmaba su escena más emotiva en "The Good Lie", un recuento novelado de refugiados sudaneses que llegan a Estados Unidos.

"No funcionó", dijo Jal. "Tuve que buscar las lágrimas en mis adentros y volverme vulnerable como un niño".

Las lágrimas sólo fluyeron con naturalidad para Jal, un ex niño soldado, cuando recordó los momentos en que perdió a miembros de su familia durante una sangrienta guerra civil en su nativa Sudán. Fluyeron, también, cuando consideró comer carne humana de su amigo moribundo tras escapar del ejército rebelde de Sudán del Sur. Canalizando su propio dolor, encontró el poder para llorar en el plató.

"The Good Lie", concebida hace más de una década por la guionista Margaret Nagle, se centra en un grupo de niños sudaneses que recorren más de 1.600 kilómetros (1.000 millas) a pie evadiendo a soldados rebeldes, luchando contra el hambre y eventualmente encontrando asilo en Estados Unidos.

Es un relato de la vida real que Jal conoce bien. Tras huir de los rebeldes, fue contrabandeado a Kenia por un trabajador humanitario británico en la década de 1990. Tenía 11 años. (Jal fue objeto del documental de 2008 "War Child", o niño de guerra).

En "The Good Lie" interpreta a Paul, el miembro sagaz de un trío sobreviviente de hermanos adoptivos establecidos en Kansas City, separados de sus hermanas que fueron despachadas a Boston.

Lo acompañan en la pantalla el exrefugiado sudanés Ger Duany y el actor británico Arnold Oceng, como el jefe de facto del grupo que tiene la tarea de reunir a la familia. Reese Witherspoon actúa como una valiente representante de una agencia de empleo que ayuda a los hombres a ajustarse a la vida moderna en el nuevo país.

El director de "The Good Lie" Philippe Falardeau, y la directora de casting Mindy Marin, originalmente se lanzaron a buscar durante seis meses a actores de ascendencia sudanesa para la cinta, que se filmó entre Suráfrica y Atlanta. Finalmente seleccionaron a Jal y Duany, así como a varios de los verdaderos "niños y niñas perdidos de Sudán", para que interpretaran versiones más jóvenes de los personajes principales.

"Alguien dijo que esta película no se hizo por 11 años, pero para mí la película estuvo esperando por nosotros durante 11 años", dijo Jal durante un almuerzo con Duany y Oceng. "Estaba esperando que la gente apropiada se reuniera y se convirtiera en familia. Reese probablemente no hubiera estado interesada en ese entonces. Hubiera sido alguien más, y no hubiera funcionado".

Aunque el póster del filme incluye el rostro y el nombre de Witherspoon, "The Good Lie" se enfoca completamente en el esfuerzo humanitario que trajo a miles de refugiados sudaneses jóvenes a Estados Unidos.

"Ella es una leyenda, una mentora, una madre", dijo Duany, quien interpreta al optimista Jeremiah. "Es una gran actriz que realmente vendió la historia. Ninguno de nosotros habría podido más que ella. Lo genial de trabajar con ella es que es tan generosa que uno se olvida de que es Reese. Simplemente pasó a ser una buena amiga. No sólo asumió este papel, sino que se tomó el tiempo de ir al campo de refugiados donde surgió la historia".

La película se convirtió en una experiencia de aprendizaje tanto para la estrella ganadora de un Oscar como para Oceng, quien ha actuado en películas y series de TV británicas desde que tenía 6 años. Oceng encarna a Mamere, el líder del grupo, que sueña con estudiar medicina y llegar a ser un doctor pero está varado llenando los estantes de un supermercado.

"No sabía nada (sobre la guerra civil de Sudán)", dijo Oceng, quien creció con su madre ugandesa en Inglaterra. "Me avergüenza no haber sabido de esto... Mi padre era de Sudán del Sur, pero murió cuando yo era muy joven. Nunca conocí a mi familia sudanesa, así que por eso me avergüenzo, porque de hecho soy mitad sudanés".

El filme, que se estrena el viernes, llega en un momento en que Sudán del Sur ha sido nuevamente golpeado por el conflicto civil y los astros de "The Good Lie" esperan que sus personajes pongan la atención internacional en la violencia que ha cobrado miles de vidas desde diciembre.

"Es como apuntar un foco de luz a un sitio oscuro", dijo Jal, cuya música se escucha en la cinta. "Cuando uno apunta un foco de luz a un lugar oscuro, la maldad actúa menos. Ese es el poder de la narrativa. Sí, la historia es una combinación de todas las historias de los niños perdidos, pero puedo ver lo que logrará cuando se proyecte en el mundo: será un despertar global de consciencia".

FUENTE: AP

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