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Penélope Cruz tuvo que peinar a Salma Hayek en la oscuridad

Teniendo en cuenta que la oscarizada Penélope Cruz pasó buena parte de su infancia en la peluquería que su madre regentaba en Alcobendas (Madrid), no resulta del todo sorprendente que la actriz presuma ahora de su talento como estilista al revelar que, hace varios años, tuvo que acudir al rescate de su amiga Salma Hayek cuando un inesperado apagón impidió a la mexicana acabar de prepararse para un evento cinematográfico.

"Salma se estaba poniendo guapa para el estreno de una película y de repente se fue la luz. Tuve que ser yo la que acabara de arreglarle el pelo en la oscuridad", recordó la estrella de Hollywood antes de aclarar, sin embargo, que no sería capaz de cortarse el pelo a sí misma. "Jamás he probado conmigo misma, es más sencillo hacer este tipo de cosas a los demás", bromeó en conversación con la revista People.

La mujer de Javier Bardem recuerda con cariño aquellos tiempos en los que, además de aprender sobre los diversos tratamientos capilares que aplicaba su madre, su presencia en la peluquería también le servía para comprender mejor el universo de las emociones humanas y, de esta forma, desarrollar la empatía necesaria para iniciar su carrera como actriz.

"En la peluquería hacía los deberes y estudiaba cuando tenía exámenes, pero también pude familiarizarme con todo lo que allí se hacía. Para mí, fue una especie de primera escuela de interpretación, porque las clientas le contaban a mi madre todo tipo de secretos sobre sus vidas privadas, sobre maridos y amantes. Eran como los personajes de una película que expresaban sus problemas y que, después de peinarse y cortarse el pelo, salían completamente transformadas", explicaba recientemente al diario The New York Times.