Atlanta Internacionales - 

EU busca en el extranjero fármaco para ejecuciones

ATLANTA ( AP ). Las autoridades correccionales en todo el país han extremado recursos _y al menos en un caso apelando a extremos legalmente cuestionables_ para obtener un fármaco para sus inyecciones letales. Lo han conseguido trabajosamente por intermediarios en Gran Bretaña y un productor en la India, o tomándolo prestado de otros estados para no demorar las ejecuciones, según documentos revisados por The Associated Press.

"Ustedes muchachos en AZ nos salvaron la vida", dijo el oficial correccional Scott Kernan, de California, a otro colega en Arizona por medio de un correo electrónico, lo que pudo haber sido una ironía no intencional, agradeciendo los 12 gramos de la sustancia recibida en septiembre. "Les invitaré una cerveza la próxima vez que vaya por allí".

La escasez de tiopental sódico, un sedante que es parte del cóctel de tres sustancias para las inyecciones letales que usan casi todos los 34 estados con pena de muerte, empezó el año pasado cuando Hospira Inc., el único laboratorio productor del fármaco y único aprobado por la Administración de Alimentos y Fármacos (FDA), dejó de producirlo.

A medida que disminuía la provisión, por lo menos seis estados _Arizona, Arkansas, California, Georgia, Nebraska y Tenesí_ obtuvieron el tiopental sódico en el exterior, y varios de ellos dijeron que la iniciativa la tomó Georgia.

Documentos obtenidos mediante solicitudes de documentación demuestran que Georgia logró ejecutar a condenados en septiembre y enero después de conseguir el fármaco de Dream Pharma, un distribuidor que comparte un edificio con una escuela de conducción automovilística en un barrio sombrío de Londres. El propietario de Dream Pharma no respondió varios llamados y correos electrónicos en procura de comentario, y a un reportero de AP que visitó la oficina la semana pasada le dijeron que el propietario no estaba disponible.

Pero la semana pasada, el Departamento Estadounidense Antidrogas (DEA) se incautó de todo el suministro de Georgia _con lo que aplaza las ejecuciones ya programadas_ por la posibilidad de que el estado hubiese pasado por alto la ley. "Teníamos interrogantes acerca de cómo la droga fue importada a Estados Unidos", dijo el vocero de la agencia Chuvalo Truesdell sin entrar en detalles.

Las regulaciones federales requieren que los estados se registren ante la DEA antes de importar una sustancia controlada y notifiquen a la agencia cuando la reciban. John Bentivoglio, ex abogado del Departamento de Justicia que representa a un condenado a muerte en Georgia, dijo en una carta fechada en febrero que Georgia parece haber violado dichas reglas, y que esas transgresiones significan que un tiopental sódico "adulterado, falsificado o inefectivo en alguna otra manera" podría ser usado en ejecuciones, por lo que los prisioneros podrían ser sujetos de un dolor extremo, en violación de la prohibición constitucional al castigo cruel e inusual.

La portavoz del Departamento Correccional de Georgia, Joan Heath, se limitó a decir que el estado coopera con los investigadores federales "para asegurarnos de que cumplimos las reglas de la DEA acerca de cómo manejamos las sustancias controladas".

Kathryn Hamoudah, del grupo Georgianos por Alternativas a la Pena de Muerte, elogió a la DEA por obligar a Georgia a "ceder sus drogas del mercado negro".

La mayoría de los estados que consiguieron o importaron la droga dijeron haber cumplido con las normas, y la DEA se ha negado a confirmar si los está investigando. Según la DEA, los estados pueden compartir o venderse mutuamente dosis de la droga siempre que ambas partes estén registradas ante la agencia y que la sustancia haya sido importada de manera adecuada.

Los documentos obtenidos por la AP muestran que las autoridades en Kentucky buscaron la droga en más de dos docenas de estados, varias compañías y la Oficina Federal Correccional durante todo el 2010. Kentucky incluso consideró efectuar tres ejecuciones en rápida sucesión antes de que expirase el suministro del estado.

Kentucky finalmente logró comprar 18 gramos el mes pasado en una farmacia de Georgia.

Nebraska anunció en enero haber comprado 500 gramos a Kayem Pharmaceutics, de la India, la cantidad mínima disponible para la venta, que es suficiente para unas 170 ejecuciones. El estado tiene una docena de condenados a muerte.

FUENTE: Agencia AP