FILIPINAS Internacionales - 

Un juez filipino aplaza la orden de arresto de un senador crítico con Duterte

Un juez filipino aplazó hoy la orden de arresto del senador Antonio Trillanes, refugiado desde ayer en la Cámara Alta, pese a que el presidente filipino, Rodrigo Duterte, ordenó su detención inmediata tras anular una amnistía concedida en 2010.

El juez Andrés Soriano, del tribunal regional de Manila, convocó una audiencia para el 13 de septiembre antes de decidir sobre el arresto de Trillanes, un exmilitar de la Marina que participó en tres intentos golpistas hace más de una década, y le dio cinco días para apelar la orden ejecutiva del presidente.

La resolución fue tomada un día después de que el departamento de Justicia y las Fuerzas Armadas recibieran la orden emitida el 31 de agosto por la que Duterte anuló la amnistía concedida hace ocho años por el anterior presidente, Benigno Aquino.

El documento indicó que el perdón de Aquino "no cumple con los requisitos mínimos para recibirla" porque Trillanes nunca la solicitó formalmente ni admitió su culpabilidad en los hechos.

También instaba al Departamento y a las Fuerzas Armada a "perseguir los casos penales y administrativos" contra Trillanes, además de ordenar a la Policía poner al senador bajo custodia a la espera del juicio.

Sin embargo, Trillanes, que se refugió en el Senado al saberse la noticia, ha mostrado a la prensa las imágenes y los documentos que prueban que en enero de 2011 aceptó formalmente la amnistía que Aquino ofreció en octubre de 2010 a los militares rebeldes y reconoció su implicación en los hechos.

A pesar de que la decisión del tribunal no autoriza su arresto inmediato, Trillanes señaló hoy a los medios que de momento no va a salir del Senado para aferrarse a una norma que impide que los legisladores sean detenidos en sesión parlamentaria.

El arresto de Trillanes sería el segundo de un legislador durante el mandato de Duterte, que arrancó el 30 de junio de 2016, después del de la senadora Leila de Lima, que permanece en prisión sin juicio desde febrero de 2017 acusada de haber aceptado sobornos de narcotraficantes, cargo que niega y considera una fabricación para dañarla.

De Lima y Trillanes promovieron una investigación en el Senado sobre las "ejecuciones extrajudiciales" de la guerra antidrogas impulsada por Duterte y figuran entre los más feroces críticos con la gestión del presidente.

Trillanes, que consideró su orden de arresto como un "claro ejemplo de persecución política", ha acusado retiradamente al presidente de ocultar una importante fortuna no declarada en paraísos fiscales desde que era alcalde de Davao, en el sur del país.

Durante el gobierno de Gloria Macapagal Arroyo (2001-2010) -actual presidenta de la Cámara de Representantes y aliada de Duterte- Trillanes fue uno de los cabecillas de tres levantamientos militares fracasados en protesta por la corrupción en el Ejército.

El exgolpista estuvo implicado en el motín de Oakwood en julio de 2003, el enfrentamiento de los marines en febrero de 2006 y el incidente de el Hotel Península de Manila en 2007.

FUENTE: EFE