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¿Cómo eliminar el olor a ajo y cebolla de las manos?

El ajo y la cebolla son alimentos esenciales en la cocina. Ayudan a dar un toque delicioso y aromático a nuestros diversos platos. El arroz, las carnes y las salsas, por ejemplo, quedan riquísimos con la ayuda de esos dos ingredientes, pero el sabor viene siempre acompañado de un efecto colateral: el olor. Para quién come, el malaliento y para los que cocinan, el olor de las manos. Y como esos olores difícilmente pueden ser eliminados con agua y jabón, hemos recopilado algunos trucos que te ayudarán a mantener las manos limpias después de cocinar. ¡Toma nota!

TRUCO 1 - SAL

Coloca una cucharadita de sal en tus manos secas y restriega con firmeza. La sal absorberá todo el mal olor de las manos y las dejará sedosas y suaves.

TRUCO 2 – AGUA CORRIENTE

La forma más fácil de quitar el olor de ajo y cebolla de las manos es dejarlas bajo el chorro de agua fría por un minuto aproximadamente. Después de ese tiempo, solo debes tomar una cuchara de acero inoxidable y frótala sobre las manos, pasándola por todos los dedos. ¡Listo!

TRUCO 3 – BICABORNATO DE SODIO

El bicarbonato de sodio también es muy eficiente para este tipo de situaciones. Coloca una pequeña cantidad sobre la palma de las manos y frótala con fuerza. El bicarbonato absorberá todos los olores y dejará sus manos súper suaves.

TRUCO 4 – LIMÓN

Las propiedades limpiadoras del limón también son muy útiles para quitar los malos olores. Solo tienes que frotar los dedos con el jugo y enjuagar con agua.

TRUCO 5 – VINAGRE DE MANZANA

Si ninguno de los trucos anteriores logró quitarte los malos olores, aplica vinagre de manzana en las manos. Este producto es súper eficiente para quitar los malos olores de las manos. Después de aplicarlo, deja las manos bajo el chorro de agua fría y aplica un jabón suave.

TRUCO 6 - UN CUCHILLO

Un truco interesante y muy fácil es utilizar el mismo cuchillo que usaste para cortar la cebolla y el ajo. Colocas las manos bajo el chorro del agua y raspas suavamente con el cuchillo y ya está, el olor dijo adiós.

FUENTE: Raquel Bellini

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