La normalidad y las largas filas de primera hora de la mañana son los dos aspectos que han marcado hasta el momento la jornada electoral en Estados Unidos, según el análisis preliminar sobre el terreno de la Organización de Estados Americanos (OEA).
"Predominan dos elementos en principio muy positivos: una afluencia importante de votantes, muy especialmente en las primeras horas, con filas de una hora o más, y mucha normalidad en la organización y mucha tranquilidad", explicó hoy a Efe la jefa de la misión de la OEA y expresidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, tras visitar un centro de votación en Arlington (Virginia).
El equipo de la OEA recorrió desde primera hora de la mañana los centros de votación de 11 estados y el Distrito de Columbia (donde está Washington, la capital) que permiten la observación electoral internacional -otros 11 estados la limitan o prohíben-.
"Hemos estado recibiendo los reportes de los observadores que tenemos desplegados en el país, yo he visitado centros en Washington DC, Maryland y aquí en Virginia, y no hemos recibido ningún reporte de incidentes", indicó Chinchilla.
"Lo que más ha preocupado en los centros de votación son los tiempos de espera más largos, pero pareciera que está asociado a que se ha presentado más gente que en otras ocasiones", añadió.
Preguntada por si no han recibido ni el más mínimo reporte de incidentes, aseguró que "absolutamente nada".
"Yo siempre digo que generalmente hay dos etapas en los procesos electorales, una con un tono que va subiendo mucho a lo largo de la campaña, asociado a las estrategias de los partidos, con discursos muy incendiarios y los medios privilegiando ese énfasis", apuntó.
"Y otra (etapa) -prosiguió- el día de las votaciones, cuando todo eso se deposita en los ciudadanos, que se apropian del proceso, lo organizan, lo vigilan, se hacen presentes y entonces pareciera que todo vuelve a la normalidad".
"Hemos visto mucha madurez, medida, tranquilidad. Lo cual es un gran contraste con días anteriores", agregó en referencia al tono brusco y la gran tensión de esta campaña electoral.
Sobre si las largas filas anuncian una participación más alta de lo habitual en Estados Unidos, donde suele rondar el 50 %, prefirió no hacer pronósticos.
"No me atrevo a decirlo, porque la afluencia de primera hora no es la de ahora. Ahora aquí ya no está llegando nadie. Regresarán al final del día, que es la distribución lógica cuando se vota en un día de trabajo", explicó.
"Podría ser (que este año haya más participación), pero preferimos esperar para hacer pronósticos", concluyó antes de subirse al coche con su equipo y seguir recorriendo centros de votación de Washington y su área metropolitana.
Chinchilla presentará este miércoles un informe preliminar de la misión de la OEA, la primera en unas elecciones estadounidenses en los 54 años de historia de su observación electoral, a la espera del final que llegará en uno o dos meses.
FUENTE: EFE