El famoso exfutbolista está preparando un nuevo desembarco en Estados Unidos para encargarse de todos los preparativos del club de fútbol que desea fundar al otro lado del Atlántico, una nueva etapa en su carrera profesional que, además, podría llevarle a recuperar su buena costumbre de acudir regularmente a casa de su amigo Tom Cruise para ver una película juntos, una de las actividad que más extraña de su vida anterior en Los Ángeles.
"Cuando vivíamos en Los Ángeles, la casa de Tom Cruise estaba solo a un par de minutos de la mía, y como somos muy buenos amigos, solíamos quedar con bastante frecuencia en su casa para ver una o dos películas. A veces tenía la impresión de que pasaba más tiempo en su casa que en la mía. Tengo muchas ganas de volver a verle y revivir los viejos tiempos", confesó el guapo deportista a la revista Sunday Times.
Aunque su popularidad y su extensa carrera profesional le han permitido codearse con figuras de las más altas esferas políticas, empresariales y sociales, el marido de Victoria Beckham jamás se atrevería a forjar una relación de tanta confianza con otro de los relevantes personajes a los que suele ver de vez en cuando: el primer ministro del Reino Unido, David Cameron.
"Nos llevamos muy bien y he estado con él en su residencia oficial varias veces, pero dudo mucho que pueda llamarle un día y decirle que me paso por su casa para ver una película. David Cameron no es Tom Cruise, y todavía nos queda mucho tiempo para llegar hasta ese punto en nuestra amistad", bromeó el astro del balón.