Salvando las muchas distancias que separan a los dos países en numerosos aspectos, nadie del Reino Unido o de Irlanda se atrevería a considerar a sus vecinos de frontera como completos extraños o seres exóticos, ya sea por sus estrechos vínculos económicos y culturales o por los numerosos conflictos políticos e identitarios que pueblan su pasado compartido.
Sin embargo, esta semana el cantante Liam Payne ha reconocido que, diez años atrás y en los albores del glorioso nacimiento de One Direction, no era capaz de entender cómo funcionaría una 'boyband' en la que uno de sus miembros, el irlandés Niall Horan, procedía de un "país completamente diferente" y supuestamente nada "cercano" al suyo.
"La verdad es que ahora no entiendo muy bien por qué estaba tan confuso al respecto, pero sí que tenía muchas dudas sobre cómo iba a operar el grupo ante el hecho de que uno de nosotros, Niall, fuese de Irlanda. En ese momento me preguntaba si el proyecto iba a salir bien con alguien que era de un país completamente diferente al nuestro, ni siquiera de un sitio cercano", ha bromeado el artista, de 26 años, en conversación con la emisora londinense Capital Radio.
Los antiguos integrantes de One Direction, con excepción de Zayn Malik, quien abandonó la formación un año antes de su disolución por las profundas desavenencias que mantenía con sus compañeros, han estado muy activos en los últimos días -tanto en las redes como en los medios- para conmemorar el décimo aniversario de la fundación del grupo, el cual ha resucitado también los perfiles sociales e incluso la página web que llevaban dos años sin actualizarse.