Guadalupe siente que ha madurado y está dispuesto a dar la sorpresa

Houston, 2 jun (EFE).- Guadalupe se ha convertido en un invitado habitual a la Copa Oro, a donde regresa por tercera vez consecutiva después de dos años en los que ha sorprendido y decepcionado con la misma intensidad.Capaces de llegar a la semifinal en su primera participación en 2007, los caribeños se despidieron en los cuartos de final de la edición del 2009 con una goleada por 5-0 a manos de Costa Rica.A la Copa del 2011, Guadalupe llega con mejores sensaciones tras su condición de subcampeón de la Copa del Caribe, y con la intención de emular o superar su primera presentación, pese a quedar insertados en un grupo difícil junto a Estados Unidos, Canadá y Panamá.Poco se sabe de sus jugadores más allá de que la mayoría militan en equipos modestos de Francia.Otros juegan en Inglaterra, Bélgica, Portugal y Estados Unidos y su principal baza es su envidiable condición física a la vez que practican un fútbol veloz, directo y ofensivo.Entre los convocados destacan David Fleurival, Franck Grandel y Richard Socrier, todos de equipos franceses y veteranos del once que ocupó la cuarta posición en 2007.Mientras que en lo colectivo el talón del Aquiles del equipo en el pasado era su contumaz desorden táctico, que solían aprovechar sus rivales en el torneo, aunque algunos expertos consideran que han madurado.No obstante esas características, el conjunto caribeño ha demostrado en cada una de sus anteriores presentaciones ser un contrincante de cuidado para cualquier selección que se le cruce en el césped por su empuje y derroche de entusiasmo.Las condiciones de afiliación del equipo de Guadalupe a los diferentes organismos que regulan el fútbol mundial también es, cuando menos, singular.Gracias a su condición de colonia francesa, la selección de la isla no tiene representación en la FIFA, por lo cual no puede participar en eliminatorias mundialistas, pero si figura como miembro asociado a la Concacaf.Por lo que el más importante torneo al que pueden aspirar a asistir, luego de la Copa del Caribe, es, precisamente, la Copa Oro.