COSTA DO SAUIPE, Brasil (AP). Los presidentes de Cuba, Raúl Castro, y México, Felipe Calderón, se reunieron hoy martes en Brasil para limar asperezas y estrechar relaciones después de varios años de tensiones bilaterales.
"No queda ninguna aspereza (entre los dos países), hay que evitar que surjan nuevas", declaró a periodistas Castro después de su encuentro de más de una hora con Calderón en el balneario de Costa do Sauipe, donde ambos asisten a la Cumbre de América Latina y el Caribe, que concluirá el miércoles.
Los dos líderes intercambiaron invitaciones para realizar visitas recíprocas a sus países y adelantaron que tales visitas se efectuarían en 2009 en fechas por definir, en una señal de que dejaron atrás los tres años de tensiones que estuvieron a punto de provocar un rompimiento de relaciones bajo el gobierno del presidente mexicano Vicente Fox (2000-2006).
Un comunicado de la presidencia mexicana indicó que la cita "fue ocasión para expresar la satisfacción mutua por el proceso de regeneración y fortalecimiento de las relaciones bilaterales que ha permitido obtener resultados concretos y positivos en la agenda compartida".
El texto agregó que en la cita se destacaron los resultados obtenidos con la puesta en vigor de un acuerdo migratorio firmado en octubre, al tiempo que se comprometieron a cooperar en la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado.
Calderón también gestó un acuerdo del Grupo de Río para incorporar a Cuba como miembro de ese mecanismo informal de concertación política entre países latinoamericanos. México ocupa actualmente la presidencia rotativa de ese grupo.
Consultado sobre el estado de relaciones con México, Castro respondió que eran "magníficas, como siempre debieron ser".
El reacercamiento diplomático entre Cuba y México, dos aliados históricos, comenzó en marzo y se profundizó en octubre cuando el canciller cubano, Felipe Pérez Roque, visitó México y firmó el citado acuerdo migratorio.