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Michelle Obama defiende presidente de EEUU, Castro ataca a rival

CHARLOTTE ( AFP )  La primera dama Michelle Obama destacó el martes el sentido de realidad de su esposo, el presidente de Estados Unidos, con el ciudadano común, sin mencionar a su rival republicano Mitt Romney, atacado abiertamente por el alcalde hispano Julián Castro.

Los dos oradores estelares de la apertura oficial de la convención demócrata en Charlotte, Carolina del Norte (Texas), coincidieron en defender a un presidente, Barack Obama, que conoce los sacrificios y deseos de la clase trabajadora, de las mayorías en el país.

"Barack conoce el sueño americano porque lo vivió, y quiere que todos en este país tengan la misma oportunidad, no importa quién sea, o de dónde venga, o cómo luzca, o qué quieras", dijo la primera dama, ovacionada de pie a su llegada al podio del Time Warner Arena, con un vestido en tonos rosa y grises platinado y unos altos tacones rosados.

La primera dama, que no mencionó a Romney en todo su discurso, recordó que su esposo "fue criado por una madre soltera que pasó trabajo en pagar las cuentas, y por abuelos a los que buscaba cuando necesitaba ayuda", dijo luego de una entrada al ritmo de un tema de Steve Wonder y un video que mostró su lucha contra la obesidad y apariciones divertidas en programas de televisión.

Michelle Obama fue la oradora principal de la primera noche de la convención demócrata, donde el alcalde de San Antonio, Texas, Julián Castro, de 37 años, se convirtió en el primer hispano en dar el 'keynote speech', como se denomina en Estados Unidos al discurso fundamental de inauguración de las convenciones partidarias.

Castro apeló a la ironía y a juegos con el público para atacar al republicano Mitt Romney por sus fórmulas económicas enfocadas en los más ricos que "fracasaron", pero que él "simplemente no lo entiende", dijo.

"Sabemos que en nuestra economía de libre mercado algunos prosperarán más que otros. Lo que no aceptamos es la idea de que a algunas personas ni siquiera se les da una oportunidad", afirmó con una fuerte ovación de la militancia.

"Mitt Romney simplemente no lo entiende. Pero Obama sí", dijo tras criticar el plan de recuperación económica del multimillonario ex gobernador de Massachussetts que prometió la semana pasada en la convención republicana en Tampa (Florida) y al afirmar que el gobierno demócrata ha creado 4,5 millones de nuevos empleos.

Cada recuerdo a Romney fue abucheado o seguido por el grito: "¡Cuatro años más!" para Obama en la presidencia.

Con un golpe de martillo, la presidenta del Partido Demócrata, Debbie Wasserman-Schultz, inauguró los debates de esta cumbre de tres días que pone en marcha la última etapa de la campaña electoral de cara a las elecciones del 6 de noviembre.

El discurso de Michelle Obama, abogada de 48 años que goza de un alto índice de popularidad (entre 65% a 70%), 20 puntos porcentuales más que su marido, fue seguido por el presidente, quien adelantó que las palabras de su esposa seguramente lo harían llorar.

"Estaré en casa y lo veré con nuestras niñas, y voy a tratar de que no vean a su papá llorar. Porque en cuando Michelle comienza a hablar, se me empañan los ojos", dijo Obama durante un acto de campaña en Virginia.

Michelle Obama apuntó a los 6.000 delegados demócratas que llegaron a Charlotte para investir oficialmente al presidente el jueves como el candidato del partido a la reelección, luego de que la semana pasada la esposa de Romney, Ann, hiciera lo propio en la convención republicana.

Tras comenzar su convención, los demócratas aprobaron un plan de gobierno que promete mantener el curso actual en un eventual segundo gobierno de Obama, al proponer impuestos más altos para los ricos e inversiones en infraestructura y servicios.

Para América Latina, mantienen el apoyo a la cooperación antidrogas, impulsar más libertades en Cuba y Venezuela y aumentar el comercio. Asimismo, los demócratas reafirman su compromiso con una reforma migratoria integral en Estados Unidos.

La carrera para ganar la presidencia sigue siendo bastante reñida, con Obama superando a Romney por apenas un punto, 47% contra 46%, un empate técnico, según un sondeo de la firma encuestadora Gallup divulgado el lunes.

La encuestadora concluyó que la Convención Nacional Republicana realizada la semana pasada en Tampa (Florida, sureste) no otorgó a Romney el impulso que tradicionalmente dan esos eventos. Ahora se espera ver cómo Obama aprovechará su momento el jueves, cuando sea su turno de aceptar la candidatura en una fanfarria que será transmitida a todo el país por los canales de señal abierta.

Entre el electorado hispano, considerado clave para ganar la presidencial, Romney sí tuvo una leve mejoría de percepción tras la convención, gracias a su promesa de crear más empleos, pero aunque "alcanzó el 30% de confianza" de estos votantes, Obama lo sigue superando por el doble: más de 60%.

Mientras los demócratas se reúnen en la convención en Charlotte, Romney se dedicará a preparar los cruciales debates que sostendrá con Obama en octubre.

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