Los pescadores de la isla de Chiloé, en el sur de Chile, realizan este miércoles por tercer día consecutivo un bloqueo de caminos, exigiendo al gobierno más ayuda tras la prohibición de extracción de mariscos debido a presencia de 'marea roja' que contamina a las especies marinas.
Cerca de un millar de pescadores artesanales y sus familias levantaron barricadas con neumáticos encendidos en las cinco rutas de ingreso vehicular a Chiloé, unos 1.032 km al sur de Santiago, una zona afectada por la presencia de la 'marea roja', producida por una excesiva proliferación de algas, que generan toxinas que contaminan los mariscos.
La semana pasada, el gobierno prohibió la extracción de mariscos y decretó zona de catástrofe en la zona, ofreciendo a unas 500 familias de pescadores un bono de 100.000 pesos (unos 150 dólares), que fue considerado insuficiente.
"¿Quién vive con 100.000 pesos y una caja de víveres que nos quieren dar? Esto es una burla, una falta de respeto hacia nosotros", reclamó Zoila Bustamante, dirigente de la Confederación Nacional de Pescadores Artesanales, a medios locales este miércoles.
Los manifestantes mantienen cortadas las rutas desde el lunes y no permiten el descenso de los vehículos que son trasladados desde el continente en barcazas, cuyo servicio también está suspendido.
La protesta dejaba ya 12 detenidos y provocó el cierre del comercio en la isla donde viven unas 140.000 personas y cuyas autoridades temen escasez de productos debido a la situación.
Los pescadores afirman que la emergencia no se debe a la marea roja, sino a una contaminación provocada por salmones en descomposición que la Marina chilena vertió en las costas donde extraen los mariscos.
"Está claro que esto no es un problema de la marea roja, porque si bien los buques tenían que ir 150 millas mar afuera, los salmones los botaron aquí en la costa", manifestó, por su parte, Jaime Assmusen, dirigente de los pescadores.
El gobierno ha descartado la versión de los pescadores y reafirma que la marea roja, provocada por una microalga, ha causado el varamiento de mariscos, peces y ballenas en varias zonas de la costa del sur chileno.
FUENTE: AFP