El Vaticano emitió nuevas normas para el proceso de determinar si ciertas curaciones califican como milagros para ganar la santidad, e incluyó ciertas salvaguardias contra posibles abusos financieros.
Las nuevas reglas, hechas públicas el viernes por la Santa Sede, determinan la forma en que un comité de expertos médicos escrutará los posibles milagros. Reflejan la determinación del papa Francisco para asegurar que el proceso de santificación —que atrae donaciones de los fieles a favor de los candidatos de canonización— sea riguroso y evite escándalos.
Entre las nuevas regulaciones hay una que establece que un milagro potencial no puede volver someterse a consideración si no consigue la aprobación del consejo de expertos médicos tras tres intentos. Otra regla dice que los expertos solo pueden recibir su paga a través de una cuenta bancaria, ya no en efectivo.
El papa Francisco exigió una mayor responsabilidad después de que se reveló que prácticamente no había supervisión financiera.