La cosecha en los viñedos en California se trasladó a la noche por ser más fresca y los trenes en San Francisco bajaron la velocidad por temor a que el calor deforme los rieles, mientras sofocantes temperaturas e incendios forestales marcan el final del verano en el oeste de Estados Unidos.
En Los Ángeles, un incendio forestal justo al norte del centro se volvió el sábado el más grande en la historia de la ciudad, dijo el alcalde Eric Garcetti. Tres construcciones se quemaron, aunque los bomberos dijeron que podían controlar las llamas a menos que los vientos se aceleraran.
También hubo incendios en una zona de secuoyas, árboles gigantescos con hasta 2.700 años de antigüedad, cerca del Parque Nacional Yosemite. Los incendios también ha obligado a mucha gente a huir de sus casas en Washington, Oregon, Montana y otras áreas que luchan con una ola de calor que lleva una semana.
En San Francisco el sábado se estableció un record de calor antes del mediodía, alcanzando los 34° C (94° F). Entrada la tarde, se reportaban 38° C (101° F) en la ciudad costera, más caliente que en Phoenix. El viernes se alcanzó un récord histórico de 41° C (106° F).
Las temperaturas alcanzaron 46° C (115° F) al sur de la ciudad. Se trata de una inusual ola de calor en San Francisco, donde por lo general en agosto hay neblina.
La región está tan caliente que las autoridades de tránsito ordenaron que los trenes bajaran la velocidad en los rieles expuestos al sol ante la posibilidad de que el calor expanda ligeramente el metal, dijo la portavoz Alicia Trost.
El fin de semana también rompió récords de calor en condados vitivinícolas al norte de San Francisco.
“Esperábamos una temporada suave", dijo Kat Doescher, enóloga en Madrone Estate Winery, cerca de Sonoma. Ella inspeccionó las uvas de chardonnay que los trabajadores cosecharon durante la noche. “Miro los pronósticos y veo una ola de calor que no amaina”.
En Los Ángeles, cientos de bomberos luchaban contra las llamas en casi 20 kilómetros cuadrados (8 millas cuadradas) de montañas cubiertas de arbustos mientras las autoridades emitían órdenes de evacuación para más de 700 hogares en Los Ángeles, Burbank y Glendale.
Desde sus aviones, los turistas toman fotos de las colinas en llamas cerca del aeropuerto Hollywood Burbank.
El alcalde Garcetti ya declaró emergencia y pidió al gobernador que hiciera lo mismo para que llegue rápidamente la ayuda estatal y federal.
FUENTE: AP