Tokio Internacionales - 

Japón: pasajera que bajó de crucero está infectada

Una pasajera que bajó del Diamond Princess después de completar la cuarentena del crucero la semana pasada dio positivo por el nuevo virus el sábado, convirtiéndose en el primer caso conocido de infección entre quienes recibieron autorización para bajar del buque al final del período de contención sanitaria, informaron funcionarios japoneses.

La mujer tiene unos 60 años y reside en la prefectura de Tochigi, al norte de Tokio, y estaba en el barco con su esposo, precisó el gobernador de Tochigi, Tomikazu Fukuda, en una conferencia de prensa televisada.

La mujer había dado negativo para el virus el 15 de febrero, cuatro días antes de que se bajara del barco con su esposo, sin que ninguno de los síntomas apareciera en ese momento. La pareja tomó un tren a casa, agregaron las autoridades.

A pesar de las fuertes dudas surgidas dentro y fuera del país, los funcionarios del Ministerio de Salud de Japón han insistido en que todo pasajero que haya completado la cuarentena de 14 días, que haya dado negativo para el virus o que no haya mostrado síntomas tiene un riesgo casi nulo de contagiarse con el virus.

"Me gustaría instar al gobierno a tomar medidas preventivas más exhaustivas", dijo Fukuda en la conferencia de prensa.

Algunos expertos y ex pasajeros han criticado la cuarentena, diciendo que las medidas contra la infección fueron inadecuadas. Estados Unidos, Australia y otros gobiernos que evacuaron a sus ciudadanos del barco les están exigiendo una cuarentena adicional de dos semanas.

El ministro de Salud japonés, Katsunobu Kato, dijo el sábado que 18 pasajeros estadounidenses, seis australianos y un israelí, que fueron sacados de Japón por sus respectivos gobiernos antes de que terminara la cuarentena del barco, dieron positivo después de regresar a casa. Dijo que los resultados eran comprensibles, porque esos pasajeros no cumplieron totalmente con los requisitos más estrictos para poder abandonar el barco.

Kato dijo que los funcionarios japoneses estaban trabajando de manera estrecha con los funcionarios de salud de sus respectivos países para hacer un seguimiento de los casos.

dieron positivo tras regresar a sus respectivos países en vuelos chárter. Algunos de ellos habían dado negativo previamente, dijo Kato.

El ministro también admitió el sábado que 23 pasajeros partieron del buque crucero Diamond Princess sin haber sido examinados para ver si portaban el nuevo virus debido a errores de procedimiento. Los errores fueron una nueva señal de la negligencia en la cuarentena del buque, en el que más de 600 personas resultaron infectadas.

Kato dijo que las 23 personas fueron examinadas antes del inicio de la cuarentena, el 5 de febrero, pero que abandonaron el buque el miércoles y jueves sin que se les aplicaran nuevos exámenes. Desde entonces, tres han dado negativo y casi todos los demás han aceptado someterse a nuevos exámenes.

Dijo que las autoridades han rastreado a los 23 y les han pedido que se sometan voluntariamente a cuarentena domiciliaria durante 14 días.

"Lamentamos profundamente que se produjera el error operativo", dijo Kato en conferencia de prensa. "Estudiaremos el error para que no volvamos a repetirlo".

Japón ha confirmado más de 760 casos del nuevo virus que apareció por primera en vez en China, entre ellos 634 del Diamond Princess, anclado en cuarentena en Yokohama, cerca de Tokio.

El barco transportaba inicialmente alrededor de 2.600 pasajeros y 1.100 miembros de la tripulación. La mayoría de los pasajeros fueron llevados a hospitales, desembarcaron o tomaron vuelos fletados a casa.

Alrededor de otras 100 personas que habían infectado a compañeros de habitación o que tuvieorn contacto con otros pasajeros durante el período de cuarentena fueron llevados a una instalación gubernamental para completar la cuarentena de 14 días.

Por otro lado, uno de los 16 nuevos casos reportados en Japón era el de un profesor de escuela secundaria de más de 60 años, lo que despertó preocupaciones por la salud de otros maestros y estudiantes de Makuhari, en la prefectura de Chiba, al sureste de Tokio.

En esta nota: