Un grupo de científicos nacionales e internacionales reafirmaron al Parque Nacional Coiba como la cuna de la tortuga carey en el Pacífico Oriental, después de realizar una segunda campaña de monitoreo en sus aguas, la cual dio grandes resultados para este año 2015.
La expedición científica se llevó a cabo en el mes de septiembre de 2014, donde se descubrieron altas densidades de tortugas carey, por lo que esta área protegida por el Ministerio de Ambiente, puede ser uno de los refugios clave para la sobrevivencia de esta especie en el Pacífico.
Los científicos, entre ellos Jeffry Seminoff y Alex Gaos; calificaron la expedición a Coiba como "histórica en Panamá y para la conservación de la tortuga carey". Se colocó un dispositivo satelital en una de las tortugas (un macho grande), el cual fue nombrado Mali Mali por uno de los guardaparques que lleva más de 27 años viviendo en la isla y ha estado transmitiendo datos de los movimientos de la tortuga de forma continua.
Durante esta campaña, el equipo avistó más de 80 individuos y pudo capturar y marcar 28 nuevos ejemplares, más de 12 recapturas del año anterior; a la vez se capturaron seis ejemplares de tortuga lora, para los cuales no se contaba con registros en la zona, empleándose una nueva técnica de captura en aguas abiertas que no se había utilizado anteriormente.
El biólogo mexicano Israel Llamas, gran conocedor de tortugas marinas, manifestó que después de una estadía de cinco días en el Parque Nacional Coiba, se siente un gran gusto y satisfacción de haber logrado los objetivos programados; manifestó que hay deseos de parte de todo el equipo de regresar en la estación lluviosa de 2015 y continuar con el proyecto.