MÉXICO. (AFP) El gobierno de México busca incursionar en la industria bioenergética y para ello ha convocado a expertos internacionales a un foro de discusión esta semana, cuando empiezan a surgir voces de preocupación en el país latinoamericano por la crisis alimentaria.
En el encuentro, que sesionará el miércoles y jueves en la ciudad de Guadalajara (oeste), también estarán presentes inversionistas del sector y los mayores productores de etanol en el mundo, al acecho de nuevos mercados.
El llamado Primer Congreso Internacional de Biocombustibles fue convocado para "impulsar el desarrollo de biocombustibles en México, a través de la difusión de las mejores prácticas de la industria mundial y las experiencias internacionales", dijo la secretaría de Energía en un comunicado.
México, igual que la mayoría de las naciones latinoamericanas, salvo Brasil, explora el terreno con una incipiente legislación para regular la producción de etanol en el país aprobada apenas el 1 de febrero pasado.
Pero las empresas internacionales ya están al acecho y entre los asistentes se encuentran expertos de Brasil y Estados Unidos, con una amplia experiencia en la materia, así como trasnacionales del tamaño de la británica BP, una de las patrocinadoras del evento de Guadalajara.
El gigante petrolero británico entró a esta industria en Brasil, la más importante del mundo, y anunció en abril pasado que comprará 50% del capital de Tropical Bioenergia, una empresa productora de etanol creada por los grupos brasileños Santelisa Vale y Maeda Group.
Los inversionistas esperan que el gobierno de Felipe Calderón defina cuándo empezará a aplicarse la legislación que obligará a incluir un porcentaje de etanol en las gasolinas que usan los automóviles de las ciudades de México, Guadalajara y Monterrey, las tres más importantes del país.
Los participantes en el foro esperan conocer el tamaño del negocio en un agasajo el miércoles con Jesús Reyes Heroles, director de la estatal Petróleos Mexicano (Pemex).
Reyes Heroles podría anunciar la fecha en que los consumidores mexicanos tendrán que comenzar a utilizar gasolina combinada con etanol y el porcentaje del bioenergético que llevará.
A la inauguración del foro está prevista la concurrencia del presidente Calderón, cuando en México se han empezado a alzar voces que alertan sobre un desabastecimiento de alimentos para el último cuatrimestre de este año.
México importa, el 65% del arroz y 50% del trigo que consume, indicó el líder de la Confederación Nacional Campesina (CNC), Cruz López.
"La CNC propuso el establecimiento de la reserva estratégica, (pero) no cumplieron con eso y ahora vamos a ver cómo se van a enfrentar los brotes que se den de especulación de precios", criticó Cruz esta semana.
Según la Asociación Nacional de Comercializadores de Campo (ANEC) México importa más de 70% del maíz amarillo y 5% de maíz blanco.
El uso del maíz para producir etanol está prohibido por la ley mexicana, debido a que se trata del grano con el que se produce la tortilla, alimento básico en la dieta tradicional de los mexicanos, aunque el sector azucarero está dispuesto a incursionar en él.
"Hay aumento de precios en los alimentos, pero eso no es un problema de biocombustibles y el mercado lo va a solucionar", argumentó hace unas semanas en México el brasileño Roberto Rodrigues, codirector de la Comisión Interamericana de Etanol y ex ministro de agricultura de Brasil.
El especialista explicó que sólo se trata de un desequilibrio que nunca hubo antes entre oferta y demanda de alimentos por un mayor consumo, principalmente en las naciones de economías emergentes como la brasileña y la mexicana.
FUENTE: Agencia AFP