SALUD Creciendo con Mamá - 

¿Por qué no darle el celular a un niño pequeño? Mira lo que podemos ofrecerle

Muchas veces el día a día obliga a los padres a ofrecerles el celular a los niños, sin conocer realmente el gran daño que les ocasiona. Hoy les diré 4 motivos por el cual no se le puede dar un celular o tablet a los niños desde 1 hasta al menos 6 años de edad.

Marilyn Cejas
Por Marilyn Cejas

Muchas veces el día a día obliga a los padres a ofrecerles el celular a los niños, sin conocer realmente el gran daño que les ocasiona. Hoy les diré 4 grandes motivos por el cual no se le puede dar un celular o tablet a los niños desde 1 hasta al menos 6 años de edad.

Esto, con base a mi experiencia con mi hija, quien actualmente tiene 4 añitos pero desde los 3 no utiliza ni celular ni tablet, y la verdad, le doy gracias a Dios que se lo pudimos quitar, a continuación, te explicaré el motivo.

Afecta el desarrollo del cerebro

Muchos expertos en desarrollo infantil subrayan la necesidad de estimular tempranamente a los niños y niñas para que alcancen el máximo desarrollo intelectual. Lo que ocurre con los teléfonos en este sentido es que la estimulación que producen no es sana.

¿Por qué no lo es? Los dispositivos móviles sobrestimulan constantemente al cerebro y proporcionan un entorno cambiante y vibrante; esta sobrestimulación para el niño es muy agradable pero no es sana, porque parte de ella no deja de ser muy artificial, algo que luego puede provocar grandes frustraciones cuando el niño se enfrente a la vida real (más aburrida y menos estimulante).

Limita el movimiento físico

El uso de las tecnologías casi siempre limita el movimiento, algo necesario para que el niño esté despierto, bien desarrollado y por tanto preparado para aprender. Si no hay movimiento corporal es más difícil obtener buenos resultados escolares o de aprendizaje.

Reducción del sueño

Si no lo controlamos o directamente negamos el uso de la tecnología, lógicamente los niños dormirán menos porque está demostrado que les afecta a la hora de conciliar el sueño, así que rendirán menos en el día y por lo tanto afectará a su desarrollo académico y a su carácter volviéndose este más huraño y negativo.

Crean adicción

El uso prolongado y por horas de forma diaria, les creará adicción y es por eso que si se lo pides, viene la tremenda pataleta, en la que pueden gritar, llorar con todas sus fuerzas, como si lo que le estuviéramos quitando fuera demasiado importante, esto, no es nada bueno para ellos, así que lo mejor es no dárselo.

Otras herramientas

Si tenemos en casa a un niño o niña que tiene 3 añitos por ejemplo, que aún no ha iniciado su etapa escolar, podemos colocarle videos en el televisor por unos minutos, luego, hablarle sobre la importancia de jugar con sus propios juguetes y que tenga al día unos minutos para colorear, para ello tengamos siempre, bien sea en la sala de la casa o en su cuarto de juegos, un escritorio con libros de dibujos y sus colores de cera preferiblemente.

Pero eso no es todo, sí contamos con otras herramientas para que nuestros niños se puedan entretener y así no ocasionarles un gran daño como en efecto les hace un celular o tablet.

En el mercado venden muchos modelos de teléfonos que cuentan con música que indica las vocales, sonidos de animales, entre otros elementos que son educativos y a la vez, interactivos; eso les gusta y es una opción de entretenimiento.

También existen dominós para niños, son súper divertidos (yo los conseguí en la Arrocha); y por supuesto, los pop it, los hay de muchos diseños y pueden ayudar a los niños con la ansiedad, calmarlos y a la vez ayudarlos con la concentración.

Definitivamente nosotras las madres nos enfrentamos a un gran reto en la medida de que nuestros hijos van creciendo, pero debemos ofrecerles una crianza positiva, alejándolos de artefactos tecnológicos que les ocasionen un gran daño.

En mi experiencia he aprendido mucho y cada vez que veo algunos juguetes interactivos me intereso porque mi hija Kiannah los tenga para que pueda contar con herramientas de entretenimiento en casa, por error cuando trabajaba desde casa le ofrecía el celular y hasta que nos pasó algo muy delicado; tanto mi esposo como yo, nos dimos cuenta que no estábamos en lo correcto, lo mejor fue que cuando le dije que no podía dárselo más, lo tomó muy bien y hasta el día de hoy no lo utiliza.

Juega mucho más con sus juguetes, se sienta en su escritorio por varios minutos a colorear, realiza manualidades conmigo y con su papá en la casa y ahora está feliz porque inició su preescolar, definitivamente, la educación y el desarrollo de nuestros hijos es vital. ¡Que Dios me l@s bendiga!

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