La Capilla Sixtina ya está lista para el inicio del cónclave, donde los cardenales electores se reunirán en estricto aislamiento para elegir al nuevo Papa. En la tradicional Sala de las Lágrimas, se han dispuesto tres sotanas blancas de distintas tallas, junto con la muceta y la estola que usará el nuevo Pontífice al impartir la bendición Urbi et Orbi tras su elección.
Entre los símbolos que recibirá el Papa electo se encuentra el Anillo del Pescador, una sortija de oro macizo con su nombre grabado en latín, utilizada antiguamente para sellar documentos oficiales del Vaticano.