El presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, anunció el miércoles el regreso de su país a las misiones de mantenimiento de paz de la ONU y colocó las recientes reformas llevadas a cabo en su país como ejemplo de la modernización que, según él, necesita ese organismo.
"México actuó con decisión y audacia. Se atrevió a transformarse y a ponerse en movimiento. Con base en esta experiencia, estoy convencido de que la Organización de las Naciones Unidas también puede cambiar", dijo Peña Nieto en su primera presentación ante el plenario de líderes mundiales reunidos en Nueva York.
Como lo hicieron antes las mandatarias brasileña, Dilma Rousseff, y chilena, Michelle Bachelet, Peña Nieto pidió una reforma del Consejo de Seguridad de la ONU, máximo órgano de decisiones de la organización.
"Necesitamos un Consejo de Seguridad que evolucione y sea representativo del nuevo equilibrio mundial (...). Consideramos que debe ampliarse el número de miembros no permanentes del Consejo, creando asientos de largo plazo, con posibilidad de reelección inmediata, en función de una representación geográfica más equitativa", dijo.
"El mundo necesita una ONU donde los miembros permanentes del Consejo no utilicen el veto en casos de violaciones graves del derecho internacional humanitario", agregó.
Peña Nieto buscó responder a las "múltiples voces que reconocen la necesidad de un cambio pero al mismo tiempo creen que es imposible lograrlo, porque nadie cederá en sus posiciones".
Para ello, recordó que en su país existía la misma situación y que mediante el denominado "Pacto por México" se pudieron plasmar "compromisos esenciales para impulsar una amplia agenda de reformas" en diferentes sectores como la energía, telecomunicaciones y el mercado laboral.
Con respecto a la ONU, el mandatario admitió que "no será fácil construir consensos" porque "se tendrán que romper inercias y cambiar paradigmas", pero aseguró que "existe el talento, la visión y la audacia para conseguirlo".
Durante su mensaje, Peña Nieto anunció por otra parte el regreso de México a las operaciones de mantenimiento de la paz, de las Naciones Unidas, realizando "labores de índole humanitaria, en beneficio de la población civil".
"México ha tomado la decisión de participar en las operaciones de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas, realizando labores de indole humanitaria, en beneficio de la población civil", dijo el mandatario.
Según la presidencia mexicana, el país ha participado en operaciones de mantenimiento de la paz en tres ocasiones, en los Balcanes (1947-1950), Cachemira (frontera entre la India y Pakistán, 1949) y El Salvador (1992-1993).
El regreso de México será "gradual en términos cuantitativos y en el tipo de labores en las que se participará", explicó la Presidencia en un comunicado.
"Estas tareas podrán comprender personal militar o civil para la realización de una amplia gama de tareas que involucren a ingenieros, médicos y enfermeros, observadores políticos, asesores electorales y especialistas en derechos humanos, entre otros", se precisó.
La participación mexicana estará supeditada a una "autorización expresa" y un "mandato claro" del Consejo de Seguridad, concluyó Presidencia.