Al margen de unos raros comentarios que realizó el pasado mes de marzo, confesando que las especulaciones acerca de su vida personal siempre le han hecho mucho daño, la princesa del pop ha preferido mantenerse al margen de la batalla legal para modificar los términos de la tutela que se le impuso hace más de una década y de la polémica que suscitó el documental 'Framing Britney', que ahondaba en este mismo tema para tratar de descubrir si la cantante estaba siendo víctima de una injusticia.
En una de sus últimas fotografías, Britney aparece posando de espaldas a la cámara enfundada en un bañador rosa y con unas botas blancas hasta la rodilla para mostrar el discreto diseño en tinta que decora su nuca.
"El rosa chillón hace que mi bronceado resalte más. ¿Habíais visto antes el tatuaje que tengo en el cuello? Está en hebreo, un idioma que se escribe al revés [de derecha a izquierda]. Reza 'Mem Hey Shin' y significa 'curación' (sic)", ha escrito junto a la imagen. "Es uno de mis tatuajes favoritos, pero irónicamente nunca lo podéis ver".
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