El tribunal que juzga al expresidente de Panamá Ricardo Martinelli (2009-2014) por un caso de espionaje político y peculado ha deliberado durante más de 10 horas y aún no decide sobre la excarcelación del exjefe de Estado solicitada el martes por su defensa.
Pasadas las 4:00 a.m. de este miércoles los jueces que constituyen el tribunal, Roberto Tejeira, Arlene Caballero y Raúl Vergara. continuaban una deliberación que iniciaron alrededor de las 18:00 hora local (23:00 GMT) del martes y que habían anunciado finalizaría unas tres horas después con el reinicio de la audiencia de juicio.
"Ya son las 04:15 y no hay respuesta", comentó brevemente a Acan-Efe Alma Cortes, del equipo de defensores del expresidente Martinelli.
A las afueras de la sede del tribunal pasaron la noche los periodistas, mientras que en la sala de audiencia lo hicieron simpatizantes y familiares de Martinelli, así como los querellantes en el proceso y los abogados de las partes.
La defensa hizo la petición de excarcelación el martes con el argumento de que la ley de Panamá establece que una persona no pueda estar en detención preventiva más de un año, que es el tiempo que ya cumplió en prisión Martinelli.
El expresidente llegó el 11 de junio de 2018 extraditado por Estados Unidos y ese mismo día fue recluido en la cárcel de mínima seguridad El Renacer, situada en las afueras de la capital de Panamá.
Ante la solicitud de cambio de medida cautelar presentada por los abogados defensores el Ministerio Público, representado por el fiscal Ricaurte González, sostuvo que la detención aplicada a Martinelli "es proporcional a los riesgos procesales que mantiene", entre ellos el peligro de fuga.
La Fiscalía siempre ha alegado que Martinelli se fue de Panamá en el 2015 y solo regresó extraditado por Estados Unidos, donde también estuvo un año preso batallando contra su entrega a la Justicia panameña.
Con el alegato del peligro de fuga, ya la Justicia de Panamá negó en cinco ocasiones el cambio de medida cautelar a Martinelli, cuya defensa la había pedido en esos casos con el argumentado principal del cuadro de salud del exmandatario, que padece una serie de dolencias crónicas como hipertensión.
El expresidente, de 67 años, se declara inocente de los cuatro cargos de los que es acusado por la Fiscalía por el caso de las escuchas, que pide 21 años de castigo, y también víctima de una persecución política dirigida por su sucesor en la presidencia y antiguo aliado electoral, Juan Carlos Varela, quien niega esa versión.
El caso de las escuchas lo abrió el Supremo en junio de 2015 porque Martinelli era para entonces diputado del Parlamento Centroamericano (Parlacen) y por el fuero que ese cargo imponía, el máximo tribunal era el único que podía investigarlo.
Pero el político renunció al Parlacen apenas llegó extraditado a Panamá y su defensa consiguió en diciembre de 2018 que la causa pasara a un tribunal ordinario, lo que alargó el proceso.
FUENTE: EFE