A diferencia de Zendaya, que no alteró su apariencia física antes de meterse en la piel de Mary Jane "MJ" Watson en las películas de Spider Man pertenecientes al universo Marvel, Kirsten Dunst no tuvo ningún problema en renunciar a su habitual melena rubia para teñirse de pelirrojo y hacer así justicia a uno de los rasgos más característicos del interés amoroso de Peter Parker en los cómics.
Sin embargo, hubo otra petición de los responsables de esos filmes relacionada con su aspecto que se negó a cumplir por considerarla ridícula e innecesaria.
"Uno de los productores trató de coaccionarme muy sutilmente para que cambiara mis dientes por la típica sonrisa perfecta de Barbie. Y yo tuve muy claro que no iba a hacerlo", ha desvelado la intérprete en una nueva entrevista al portal news.com.au.
Lo cierto es que su experiencia en ese set de rodaje no estuvo exenta de momentos desagradables, según ha revelado ahora, ya que las escenas de acción también acabaron convirtiéndose en un motivo de tensiones constantes cuando ella solicitó por ejemplo que se utilizara un doble para una secuencia en la que debía "hacer puenting" desde un tejado.
"La verdad es que no quería hacerlo desde un principio y cuando hicimos la prueba les dije: 'Deberíais haberla rodado porque no pienso repetirlo. Vais a tener que buscar otra alternativa'. Pero es que estaba aterrada y odiaba la idea de volver a pasar por ello", ha confesado la actriz, que se alegra de haber contado con "grandes ejemplos" en los inicios de su carrera de mujeres fuertes como Sofia Coppola -a cuyas órdenes trabajó siendo una adolescente en 'Las vírgenes suicidas'- que le enseñaron a no ceder ante la presión.
"Tuve influencias muy buenas de mujeres que me repetían siempre: 'Eres muy buena, tienes que aprender a gustarte con tus dientes tal y como son, no cambies nada de ti'. Me inculcaron una percepción muy fuerte de lo que me hacía sentir cómoda y lo que no. Al fin y al cabo, se trata de una película o de una serie. No voy a correr el riesgo de matarme o hacerme daño si mi intuición me está diciendo: 'No lo hagas'".