En la vuelta de los fans a los estadios del país, por primera vez desde diciembre, los jugadores no parecían inspirados para asegurar el espectáculo, previo a la final de la Copa de Inglaterra.
Un triunfo por la mínima pero lógico porque el Leicester City tomó más riesgos en esta segunda semifinal de la Copa de Inglaterra, cuyo primer tiempo tuvo un nivel de juego muy bajo.
La primera ocasión llegó a la media hora. Tras una recuperación alta, el belga Youri Tielemans lanzó a Vardy a la espalda de la defensa, pero tras su fulgurante aceleración el goleador inglés no fue capaz de cuadrar su tiro, molestado por un defensa (33).
Después un remate de cabeza de Wilfried Ndidi rozó el larguero cuando Fraser Forster estaba batido (41).
Por detrás en el marcador, los Saints intentaron reaccionar, principalmente con una volea de Ibrahima Diallo que pasó cerca de la portería defendida por Kasper Schmeichel (62).
Finalmente, el Leicester City logró el objetivo y jugará la final de Copa de Inglaterra contra el Chelsea de Thomas Tuchel, que el sábado batió al gran favorito Manchester City (1-0), el 15 de mayo en Wembley.