Marruecos Internacionales -  13 de enero de 2023 - 13:23

Marruecos y un periodista español se enfrentan en la justicia por el caso de espionaje Pegasus

Diseñado por la empresa israelí NSO Group y vendido a numerosos países, este software permite acceder a los mensajes y datos de un teléfono inteligente.

Marruecos y un periodista español especializado en información sobre el reino norteafricano se enfrentaron este viernes en un tribunal de Madrid, con Rabat negando haberle espiado y el reportero declarándose "acosado" por las autoridades magrebíes.

El proceso, iniciado por las autoridades marroquíes contra Ignacio Cembrero, es un nuevo episodio del "caso Pegasus", derivado de la investigación publicada en julio de 2021 por un consorcio de 17 medios internacionales y que reveló que hasta 50,000 personas de todo el mundo habían podido ser espiadas por ciertos gobiernos, entre ellos el de Marruecos, a través del programa informático Pegasus.

Diseñado por la empresa israelí NSO Group y vendido a numerosos países, este software permite acceder a los mensajes y datos de un teléfono inteligente, e incluso activar a distancia su cámara y micrófono.

Entre los 180 periodistas de esa lista figuraba un español, Ignacio Cembrero, reportero especializado en el Magreb desde hace más de 20 años, que ahora escribe para el diario digital El Confidencial y que es considerado como un experto sobre Marruecos, país con el que ha tenido numerosas diferencias.

Desde 2021, Cembrero ha repetido en muchas ocasiones -incluso ante una comisión del Parlamento Europeo en noviembre-, que estaba convencido de que Rabat era el responsable del pirateo de su teléfono, pese a admitir que no tenía pruebas formales.

Marruecos decidió llevarle a los tribunales, en una medida similar a la adoptada en Francia, donde demandó por difamación a los medios que le acusaron de haber usado Pegasus para espiar a políticos, entre ellos el presidente Emmanuel Macron, y periodistas. Sin embargo, sus denuncias no fueron admitidas por la justicia.

"Acción de jactancia"

En España, sus abogados recurrieron a una vieja disposición legal que data de la Edad Media, y ahora caída en desuso, llamada "acción de jactancia", que se refiere a cuando alguien alardea de algo -en este caso de ser víctima de espionaje- sin pruebas.

Preguntado por uno de los letrados de Marruecos, Sergio Berenguer, el periodista confirmó que no podía probar que hubiera sido espiado, pero aseguró no tener ninguna duda de que el hackeo se había producido efectivamente, ni sobre sus responsables.

En junio de 2021 Cembrero ya se había sorprendido al encontrar en una publicación considerada como muy próxima a las autoridades marroquíes el contenido de mensajes que había intercambiado por WhatsApp con responsables españoles.

"He llegado a la conclusión [...] de que solamente una potencia extranjera, que es Marruecos, podía haber hackeado mi teléfono", reiteró el periodista, de 68 años, en respuesta a las preguntas de los abogados de la acusación, rechazando su invitación a retractarse.

"No es posible afirmar que el Reino de Marruecos tenga alguna responsabilidad" en este caso de espionaje, que ni siquiera está probado, aseguró de su lado Sergio Berenguer al concluir su exposición, negando que el caso tenga que ver con la libertad de expresión o la libertad de prensa, ya que Cembrero actúa, según él, por "afán de notoriedad".

Marruecos pide al tribunal que dictamine que no tiene nada que ver con un posible pirateo del teléfono de Cembrero, lo que supone proclamar su inocencia. El reino ha renunciado a reclamar una indemnización por los perjuicios que dice haber sufrido, pero quiere que el periodista pague las costas de justicia.

Libertad de expresión

En su argumentación, el abogado de Cembrero, Javier Sánchez Sánchez, insistió sobre lo que él estima que es el fondo del caso, "la pretensión de un Estado extranjero de silenciar a un periodista español".

"Estamos ante un SLAPP", añadió el abogado, recurriendo a un término en inglés que se refiere a los pleitos cuyos costes y molestias sirven para disuadir y acallar, un proceso que persigue "intimidar, agobiar al periodista".

La Comisión Europea presentó en abril una propuesta de directiva para proteger a los medios contra la multiplicación de estos procesos que podrían incidir en la libertad de expresión.

El abogado principal de la parte marroquí, Ernesto Díaz-Bastien, aseguró sin embargo a la AFP que esta acusación de proceso mordaza era "absolutamente infundada".

Cembrero dijo al tribunal que es objeto de "acoso" por parte de Marruecos, recordando que era la cuarta vez desde 2014 que Rabat le llevaba a los tribunales.

FUENTE: AFP

En esta nota: