Ciencia Ciencia -  24 de mayo de 2010 - 12:30

Lo que hay que saber sobre el fútbol

JOHANNESBURGO ( AFP ). El fútbol, cuyo 19º Mundial tendrá lugar en Sudáfrica (11 junio-11 julio), no escapa a la curiosidad de la ciencia, que ofrece claves para comprender la biomecánica del juego, las leyes físicas que lo rigen, la nutrición y la psicología de los jugadores.

- Tirarse a 'la piscina':

El psicólogo británico Paul Morris ha estudiado la cuestión de cómo saber cuándo un jugador se tira a 'la piscina' fingiendo que le han hecho falta.

Cuando un jugador cae con los brazos hacia arriba, las manos abiertas, el torso bombeado y las piernas plegadas, no hay duda, pues "las leyes biomecánicas dicen que eso no puede ocurrir de manera natural", dice Morris.

Cuando hay falta, "instintivamente, los brazos " del sujeto que sufre la infracción " van hacia abajo para amortiguar la caída o hacia un lado para guardar el equilibrio ", según Morris.

- El deporte más excitante:

Existe la prueba científica según la cual el fútbol es el primer deporte en términos de sorpresas, pues es la diciplina en la que se registran más victorias de quien menos se esperaba, según las estadísticas del laboratorio mexicano Los Álamos, que analizó en 2006 los resultados de los principales clubes desde 1888.

Por su parte, el fútbol americano es mucho más previsible, porque las opciones de victoria del 'a priori' rival débil son un 25% menores que en el 'soccer'.

- Los peligros del penal:

Mirar una tanda de penales puede costarle la vida a los hombres frágiles, mientras que las mujeres no corren ningún riesgo.

Tanto es así que el número de hospitalizados por una parada cardiaca aumentó en Inglaterra en un 25% cuando la selección del país europeo perdió en los penales ante Argentina, el 30 de junio de 1998, en partido de octavos de final del Mundial de Francia.

En la Eurocopa de 1996, la tasa de muertes por crisis cardiaca o accidente vascular en el cerebro aumentó en un 50% el día en que Holanda fue derrotada por Francia en los penales, en uno de los choques de los cuartos de final.

- Hormonas secretadas en su estadio:

Los investigadores británicos Sandy Wolfson y Nick Neave han estudiado hasta qué punto favorecen las hormonas secretadas por los futbolistas que juegan en su estadio.

Midiendo los niveles de testosterona de los jugadores que compiten en su feudo, de los que lo hacen como visitantes y de los que entrenan, Wolfson y Neave concluyen que esa hormona estaba más presente en los futbolistas que competían en su estadio.

La hormona masculina está vinculada al dominio, la confianza y la agresividad, por lo que parece que los jugadores locales están más decididos a defender su territorio.

- La ventaja de vestir de rojo:

Los equipos que visten de rojo ganan más a menudo, según un análisis realizado por universitarios británicos en 2008, que tomaron sus datos de la Premier League.

En esa liga, el Manchester United, el Liverpool y el Arsenal ganan más a menudo, mientras que los equipos que visten de amarillo o de naranja ganan menos.

Está por ver si estos datos se confirman en el Mundial de Sudáfrica, en el que participará España, campeona de la Eurocopa-2008 y que viste de rojo, y Brasil, una de las selecciones favoritas, pentacampeona en el torneo planetario, pese a vestir de amarillo.

- Explicación para los goles legendarios:

Pocos aficionados habrán olvidado el golazo del brasileño Roberto Carlos a Francia en 1997, que transformó un libre directo gracias a que el balón tomó un impresionante efecto. Según los físicos, el recorrido que hizo la pelota se explica por el Efecto Magnus y el Principio Bernoulli.

Justo antes del golpeo de balón del brasileño, el aire flota de manera irregular alrededor de la pelota, que al recibir el impacto del pie sale disparada a toda velocidad.

En contacto con el aire, se va ralentizando el avance del balón y provoca un movimiento curvo, de acuerdo con el efecto dado inicialmente.

Esto explicar que el disparo de Roberto Carlos evitara en principio la barrera de jugadores galos antes de meterse en la portería tras golpear ligeramente el poste izquierdo.

- Las manos hablan por sí solas:

Mirar las manos de los jugadores puede ayudar a adivinar quién va a ganar el Mundial. John Manning, de la Universidad de Liverpool, estableció que los mejores jugadores tenían dedos anulares más grandes que sus índices.

- Sin alcohol: Beber una cerveza u otras bebidas alcohólicas no es la mejor forma de recuperarse de un partido, según un estudio neozelandés publicado en enero en el Journal of Science and Medicine in Sports.

Beber sin moderación tras un esfuerzo físico reduce la fuerza muscular entre un 15 y un 20 por ciento, efectos que duran varios días.

Téngase en cuenta, que según dicho estudio, beber de manera moderada tampoco está recomendado.