Panamá y Costa Rica acordaron el jueves mejorar la vigilancia policial, aduanera y migratoria en su punto fronterizo para combatir al crimen organizado.
Los ministros de Seguridad de Panamá, Rodolfo Aguilera, y de Costa Rica, Luis Mata Vega, firmaron un amplio acuerdo para intercambiar información y tecnología, así como establecer un puesto binacional en algún sitio sensitivo, como el que existe en la localidad de La Unión en la frontera selvática colombo-panameña.
La creación de una fuerza de tarea conjunta policial para enfrentar el delito también figura entre las medidas acordadas en una reunión de dos días celebrada en la provincia de Bocas del Toro, en el Caribe panameño. El ministro de Seguridad de Honduras, Julián Pacheco, asistió como observador.
Panamá y Costa Rica, que no cuentan con ejércitos, enfrentan un desafío mayor en su frontera común. La zona limítrofe de Paso Canoas ha sido tradicionalmente considerada vulnerable al tráfico de drogas, armas y de personas, así como al contrabando de mercancías y disputas en el sector transportista.