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Desinformación en campañas electorales ¿Es perjudicial?

"El combate contra la desinformación en campañas electorales debe ser proactivo, que se genere un clima institucional y político adecuado", Rafael Rubio.

Yulilka Godoy
Por Yulilka Godoy

El asesor político, Rafael Rubio, hizo referencia al tema de la desinformación en las campañas electorales, lo perjudicial que podría ser no tomar las medidas adecuadas a tiempo, y la necesidad de que los organismos electorales afronten el problema, aún con mayor prioridad, en esta temporada de campañas.

“La desinformación en campañas electorales ha empezado a ser un problema real desde el año 2016, con la campaña de Trump y el Brexit no hay proceso electoral en el que la desinformación no haya tenido una influencia cierta”, dijo Rafael Rubio.

“De allí que sea necesario que los organismos electorales afronten el problema y lo hagan no solo de una manera reactiva, tratando de cancelar la desinformación cuando existe y contrarrestarla, sino que lo hagan de manera estratégica e integral”, continuó.

El asesor político abordó sobre el anonimato en las redes sociales, y lo perjudicial que puede ser, debido a que permite incluso el acoso y violencia de género.

“Hay un debate muy grande sobre si el anonimato en las redes sociales debería permitirse o no, por un lado está claro que en el anonimato la gente lleva a cabo comportamientos, usando expresiones que no son solo desinformación, sino muchas veces de acoso y violencia política, aún más contra la mujer”, aseguró.

https://twitter.com/TReporta/status/1673696443272404992

¿Cómo se combate la desinformación?

Con relación al combate a la desinformación, el especialista señaló que se debe hacer de manera integral (a medio y largo plazo), entendiendo que la campaña política es una práctica permanente; trabajando en el ámbito de concienciación, educación para que los ciudadanos adquieran un ámbito crítico y que sean capaz de distinguir la verdad de la mentira.

"El combate contra la desinformación en campañas electorales debe ser proactivo, que se genere un clima institucional y político adecuado y permita a los ciudadanos educarse para distinguir lo que es falso y verdadero".

Asimismo, sugirió la debida investigación, no persiguiendo a personas que tal vez se equivocan en la distribución de una información falsa por desconocimiento, sino a las organizaciones que reinciden en esta práctica.

"No se trata de perseguir a cualquier que comparte algo que no es verdad por error o ignorancia. Es básico perseguir a aquellas organizaciones que tienen esa voluntad de interferir de manera inadecuada en el proceso electoral", culminó.