“La situación no se está saliendo de control”, dijo el doctor Ahmed Ogwell, director en funciones de los Centros Africanos de Control y Prevención de Enfermedades. “Tenemos buena visibilidad de todos los contactos”.
Localizar a los contactos resulta crucial para frenar la expansión de enfermedades contagiosas como el ébola.
Uganda declaró el 20 de septiembre un brote de la cepa sudanesa de ébola. El epicentro es una comunidad rural en el centro del país, a unos 150 kilómetros (93 millas) de la capital, Kampala.
El brote se ha expandido a Kampala en los últimos días después de que varios enfermos buscaran atención médica en la capital. Entre los al menos 15 casos confirmados en la ciudad hay seis niños que asisten a tres escuelas distintas, según dijo el miércoles la ministra de Salud, lo que aumentó el temor a nuevos contagios.
No hay una vacuna autorizada para la cepa sudanesa del ébola, pero se espera que dos candidatas a vacunas se prueben en ensayos clínicos que según las autoridades comenzarán en cuestión de días.
Este brote de la enfermedad, que se manifiesta como una fiebre hemorrágica viral, ha contagiado por ahora a 109 personas y matado a 30, incluidos cuatro trabajadores de salud.
FUENTE: Associated Press