El joven Álex Lequio ha perdido la batalla contra el cáncer que le fue diagnosticado hace dos años y contra el que había venido luchando de manera ejemplar, sin perder en ningún momento esa actitud positiva que derrochaba tanto en las redes sociales como en las entrevistas que concedió durante ese tiempo.
El hijo de Ana Obregón y Alessandro Lequio ha fallecido este miércoles en la clínica de Barcelona en la que ingresó hace dos meses para someterse al mismo tratamiento que había recibido en el verano de 2018 en el prestigioso Memorial Sloan Kettering Cancer Center, donde fue atendido personalmente por el oncólogo español José Baselga, director por aquel entonces de la institución.
Sus padres le acompañaron a la ciudad condal para seguir apoyándole de la misma manera que lo habían hecho desde el momento en que le fue diagnosticada la enfermedad, cuando Ana se trasladó a Nueva York y Alessandro estuvo viviendo a caballo entre Estados Unidos y España.
Las últimas noticias en torno al estado de salud Álex que se habían conocido antes de su traslado a Barcelona era que había ingresado en dos ocasiones, en espacio de una sola semana, en la clínica Ruber Internacional de Madrid, aunque su madre explicó entonces que se debía a una gastroenteritis que ella misma le había contagiado y que, por la debilidad de su sistema inmunológico, requería mayores niveles de vigilancia y supervisión médica.