El sheriff del condado de Los Ángeles, Alex Villanueva, ha salido a la palestra este jueves para desvelar que su departamento ya ha determinado oficialmente la causa de ese aparatoso accidente que sufrió, el pasado mes de febrero, el legendario golfista Tiger Woods, quien todavía se recupera de las graves heridas que sufrió en consecuencia.
Sin embargo, el máximo responsable de las fuerzas de seguridad del área metropolitana de Los Ángeles ha asegurado que todavía no puede ofrecer públicamente los resultados de la investigación, ya que todavía ha de negociar con el representante del deportista los términos en que se dará a conocer dicha información. De forma más concreta, Tiger Woods tiene que dar personalmente luz verde a la publicación de determinados detalles que podrían vulnerar su derecho a la intimidad.
"Tenemos todo el contenido de la caja negra, básicamente todo lo que necesitamos. La investigación ha sido completada, sellada y entregada. No obstante, no podemos desclasificarla hasta que no contemos con el permiso expreso de las personas involucradas en la colisión", ha explicado Villanueva durante una retransmisión realizada a través de Facebook Live.
Tiger Woods, de 45 años, sufrió "lesiones graves" en sus dos piernas tras estrellar su vehículo, un Genesis SUV, contra una de las señales de entrada a los llamados 'Rolling Hill Estates', ubicados en el sur del estado de California. Asimismo, y una vez perdido por completo el control del automóvil, el golfista atravesó la mediana de la carretera hasta que finalmente se detuvo en el arcén de la carretera, en el sentido habitual del tráfico, como se desprende de la información que proporcionó la misma oficina del sheriff tras el suceso ocurrido el pasado 23 de febrero.