ANCHORAGE, Alaska, EEUU ( AP ). Un empleado de banco de Anchorage desfalcó más de 4 millones de dólares a la antigua usanza, sacándolos del edificio, de acuerdo con fiscales federales.
Gerardo Adan Cázarez Valenzuela, de 26 años, es acusado de rellenar cajas de computadoras con 4,3 millones de dólares y sacarlas de una bóveda de KeyBank en un carrito con ruedas. Fue arrestado en México el 1 de agosto y acusado el miércoles por un jurado investigador en Anchorage, informó la oficina del fiscal de Estados Unidos.
Valenzuela, también conocido como Gary Cázarez, permanecía en México el jueves.
Detalles del caso fueron revelados en una declaración jurada presentada por la agente del FBI Susan Cusack basada en los equipos de vigilancia del banco, entrevistas con empleados e ingresos de Valenzuela.
Según Cusack, Valenzuela entró en la bóveda a las 6:39 de la tarde del 29 de julio, un viernes, con tres cajas de computadoras en un carrito con ruedas. Apagó la luz de la bóveda y llenó las cajas con dinero en efectivo.
Apenas 16 minutos después, estaba empujando las cajas y una bolsa de computadora fuera de la bóveda, dijo Cusack, y a las siete de la noche cargaba las cajas en un vehículo que conducían él y su novia. Cinco minutos más tarde, fue visto cuando regresaba el carrito a la bóveda y después se marchó conduciendo.
Valenzuela se dirigió a su casa y pasó el dinero a maletas de lona, de acuerdo con la declaración, luego condujo al aeropuerto internacional Ted Stevens de Anchorage, donde dos días antes había arreglado los detalles para un vuelo privado.
El charter lo llevó a Seattle, donde tomó un taxi que lo llevó conde su novia, Leysa S. Bindas.
Mientras estaba en el taxi, según el FBI, Valenzuela le preguntó al conductor dónde comprar un arma, y este lo llevó a un vendedor donde consiguió un fusil AK-47, un revolver y munición.
La mañana siguiente compraron un auto compacto y condujeron hacía el sur, hacia el estado mexicano de Sonora, donde pretendían visitar al tío de Valenzuela.
El 1 de agosto, según el FBI, Valenzuela compró dos boletos de autobús y abandonó el auto.
Las autoridades mexicanas detuvieron el autobús ese día en Sonoita, México, y al abrir las maletas de Valenzuela encontraron armas, munición y unos 3,8 millones de dólares.