KARACHI ( AFP ) - Al menos diez personas murieron en 24 horas en Karachi (sur), la gigantesca capital económica del Pakistán, en violencias político-étnicas y religiosas de las que la ciudad es regularmente escenario, anunció la policía el martes.
Entre las víctimas figura la esposa de un abogado de Baluchistán, provincia de suroeste donde se desarrolla una rebelión separatista, así como su hija adolescente.
Las dos mujeres volvían de un matrimonio el lunes en la noche cuando desconocidos que viajaban en una moto interceptaron su automóvil y dispararon. Su chofer también murió, explicó a la AFP Rahim Ullah, un oficial de la policía de Karachi.
"Al menos diez personas murieron en asesinatos por encargo en las últimas 24 horas", declaró a la AFP el martes en la tarde Sharfuddin Memon, un alto funcionario del ministerio del Interior de la provincia del Sind, de la que Karachi es la capital.
"Algunos fueron por razones religiosas", agregó, refiriéndose a los homicidio de los que la minoría chiita del país es regularmente víctima de parte de extremistas sunitas, en particular en Karachi.
En una semana, el balance de estas violencias es de 25 muertos, esencialmente chiitas, entre ellos tres abogados y dos médicos, afirmó un responsable de la seguridad en la ciudad.
Estas matanzas, perpetradas esencialmente por bandas armadas y grupos criminales que se la expresión de rivalidades políticas, étnicas y religiosas, se producen periódicamente en las megalópolis de más de 18 millones de habitantes.
Según ONG paquistaníes, una mil personas murieron en 2011 en Karachi en esta violencias políticas, étnicas y religiosas, un centenar de la cuales sólo en una semana en octubre.