ROMA ( AFP ). El papa Benedicto XVI presidió este miércoles en la iglesia romana de San Sabina, en el barrio Aventino, la liturgia del miércoles de Ceniza, con la que se inicia la Cuaresma de los católicos, 40 días antes de la Semana Santa y la Pascua.
Además del Papa, asistieron varios cardenales, quienes cumplieron el rito de marcar con ceniza una cruz en la frente y pronunciaron la fórmula bíblica: " Polvo eres y en polvo te convertirás ".
Durante la ceremonia, el pontífice, que llegó a bordo de un pequeño papamóvil para evitar recorrer a pie la calle para acceder a la iglesia, marcó la frente de una decena de cardenales y obispos que lo acompañaban así como de prelados y fieles.
El Papa visitó primero la iglesia de San Anselmo, a pocos metros de distancia, y luego se trasladó al otro templo en el papamóvil eléctrico, el mismo que había empleado durante su visita este año a Venecia.
En la mañana, el Papa recordó ante los cerca de 7.000 peregrinos que llenaban el Aula Pablo VI del Vaticano que en la Iglesia antigua la cuaresma era el tiempo en el que los catecúmenos iniciaban su camino de fe y conversión para recibir el bautismo.
" La Cuaresma es una época favorable para la conversión de los corazones ", dijo.
El Papa denunció el "desierto" del mundo por el que peregrina la iglesia así como " la pobreza de palabras de vida y de valores ", además del " secularismo y la cultura materialista, que encierran a la persona en el horizonte mundano de la existencia sin ninguna referencia a lo trascendente ", dijo.
"En este ambiente, el cielo sobre nosotros es oscuro, porque está cubierto por las nubes del egoísmo, la incomprensión y el engaño ", agregó.
Para algunos observadores el Papa hacía referencia a los males que afectan a la iglesia moderna, desde los escándalos por abusos sexuales a menores de edad por parte de curas hasta las recientes revelaciones de intrigas y guerras ocultas dentro del Vaticano.
" No obstante, también para la Iglesia de hoy el tiempo del desierto puede transformarse en tiempo de gracia, ya que tenemos la certeza de que aún de la roca más dura, Dios puede hacer brotar agua viva que refresca y restaura ", concluyó.
A partir del domingo el pontífice cumplirá la tradicional semana de retiros espirituales, por lo que las audiencias públicas serán suspendidas.