CARACAS (AP). El agregado comercial de la embajada de Costa Rica en Caracas fue encontrado en la madrugada del martes por un trabajador tras ser liberado por sus secuestradores que lo mantuvieron retenido por poco más de 24 horas, se informó oficialmente.
El diplomático costarricense Guillermo Cholele se encuentra en "buen estado de salud", dijo el ministro de Relaciones Interiores, Tareck El Aissami, en conferencia de prensa al dar detalles del proceso de liberación.
"No hubo ningún pago", expresó El Aissami al descartar el pago de recompensa en el caso, y agregó que liberación de Cholele se provocó gracias a la "presión policial".
El ministro relató que Cholele fue encontrado "...por un trabajador que se encontraba en esa hora (en la madrugada) distribuyendo periódico. El lo traslada al módulo policial más cercano". El Aissami descartó que policías del estado central de Miranda hayan avistado al funcionario diplomático, tal como aseguró más temprano el jefe del cuerpo.
"Están plenamente identificados los autores materiales del secuestro", señaló el ministro al precisar que han sido identificadas dos bandas, que operan en los estados Guárico y Miranda, que habrían participado en el rapto, y acotó que en las "próximas horas" esperan realizar algunas detenciones.
Como parte de las pesquisas las autoridades lograron ubicar en el norte de la capital el vehículo del funcionario diplomático, informó el ministro.
El director de la policía del estado central de Miranda, comisario Eliseo Guzmán, dijo a la AP que el diplomático deambulaba en la cercanía de la estación de gasolina El Trebol de la localidad de Charallave, a unos 60 kilómetros al suroeste de la capital.
"Estaba un poco desorientado", señaló Guzmán. Dijo que fue hallado en medio de la vía con una "pequeña herida" en la cabeza.
"Se identificó con su nombre...y además cargaba una documentación que lo acredita como diplomático en nuestro país", agregó.
El jefe policial dijo que Cholele relató que lo mantuvieron en un vehículo con los ojos vendados y transitaron con él aproximadamente por una hora antes de liberarlo.
"Estamos seguros que quizás la presión (policial) hizo que lo abandonaran allí (en Charallave)", precisó.
Agregó que tres horas después de su ubicación Cholele fue entregado a miembros de la policía judicial luego ser revisado por un médico.
Cholele fue secuestrado la noche del domingo cuando desconocidos armados lo interceptaron al llegar a su residencia en el barrio La Urbina, en el este de la capital. La cancillería de Costa Rica informó que los secuestradores habían solicitado a través de una llamada telefónica un monto económico por su rescate.
El agregado comercial costarricense, de 60 años, tiene casi seis años destacado en Venezuela, donde vive con su esposa y dos hijos, según informó la embajadora del país centroamericano, Nazareth Avendaño.
El Aissami se comunicó con Avendaño a las 4.15 de la mañana del martes para informarle que Cholele había sido liberado, informó la cancillería de Costa Rica en un comunicado.
"Fue trasladado a instalaciones oficiales para ser sometido a un chequeo médico y a responder preguntas de las autoridades que ayuden a esclarecer el caso", refirió el escrito.
El canciller costarricense, Enrique Castillo, expresó a través del comunicado que la noticia de la liberación de Cholele "trae enorme tranquilidad" a su familia y al gobierno.
Cholele es el tercer funcionario diplomático secuestrado en Venezuela en los últimos cinco meses.
En enero fue secuestrado en Caracas el embajador mexicano Carlos Pujalte, junto con su esposa. Ambos fueron liberados cuatro horas después.
El Aissami confirmó el martes que la residencia de Pujalte en la capital fue asaltada recientemente, pero no ofreció detalles.
En noviembre del año pasado permaneció cautivo por varias horas en el norte de la capital el cónsul general de Chile, Juan Carlos Fernández, quien resultó herido de bala en el secuestro.
Venezuela enfrenta altos índices de criminalidad y la población menciona constantemente en las encuestas que este es el problema más grave del país.
De acuerdo con cifras oficiales, en 2010 se registraron 48 homicidios por cada 100,000 habitantes, lo que convierte al país en uno de los más violentos de la región.
Aissami admitió a inicios de año que pese a los esfuerzos el gobierno y las autoridades policiales no han logrado bajar el índice de homicidios.
De acuerdo con cifras de la organización no gubernamental Observatorio Venezolano de Violencia, durante 2011 fueron asesinadas 19,336 personas, lo que representó un aumento de 10% respecto del año anterior.
FUENTE: Agencia AP