El líder demócrata Matteo Renzi conformó un nuevo gobierno de amplia coalición el viernes y dijo que su objetivo es darle "esperanza" al país agobiado por el estancamiento económico.
Renzi, de 39 años, será el premier más joven de Italia cuando él y su gabinete presten juramento el sábado. Será también el tercer jefe de gobierno consecutivo que llega al puesto sin ser elegido. El último premier elegido fue Silvio Berlusconi, en 2008, cuyo gobierno fue derribado por los escándalos.
Renzi era alcalde de Florencia cuando orquestó una maniobra política la semana pasada para obligar a su correligionario Enrico Letta a renunciar luego de 10 meses al mando de una coalición frágil, dividida por las disidencias internas.
Los socios de la coalición serán los mismos: el Partido Demócrata, de centroizquierda, el socio mayor, apuntalado por partidarios del ex premier Mario Monti y ex partidarios del conservador Berlusconi.
Renzi dijo a la prensa en el palacio presidencial del Quirinal que quiere enviar a la comunidad internacional un "mensaje fuerte" de que su gobierno aprobará rápidamente las reformas electoral y económica.
El presidente Giorgio Napolitano exhortó al nuevo gobierno a aprobar rápidamente "las reformas crucialmente necesarias para volver a Italia competitiva".
"No podemos darnos el lujo de perder esta oportunidad", dijo Napolitano.
Renzi dijo que su intención es mantener el gobierno durante cuatro años, hasta el final del actual período parlamentario en 2018. Sin embargo, muchos observadores dudan que pueda hacerlo, dado que los socios son los mismos y Berlusconi ansía el regreso al poder de su partido derechista Forza Italia.
El crucial ministerio de Economía estará a cargo de Pier Carlo Padoan, quien aporta el prestigio internacional y la experiencia de haber sido economista jefe de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE).
Un aspecto interesante es que el gabinete de 16 ministros cuenta con igual número de hombres y mujeres. La mayoría son políticos de carrera, una diferencia importante con el gabinete de "tecnócratas" presidido por Monti en 2011.
En ese momento Italia se tambaleaba al borde del desastre, cuando los mercados internacionales perdieron confianza en que el entonces premier Berlusconi sería capaz de aplicar las medidas de austeridad necesarias para impedir que el país se saliera de la eurozona y arrastrara a otros con él.
Letta fue derribado por el joven ambicioso Renzi en momentos en que Italia ha empezado a mostrar señales de crecimiento y los inversionistas en los mercados de bonos pierden el temor de que el país sea incapaz de pagar sus deudas. De los 18 países de la Unión Europea que usan el euro, solo Grecia está más endeudada.
A pesar de ello, los líderes del sector industrial ávidos de crecimiento y los sindicatos enfurecidos por el elevado desempleo presionaron por un cambio de gobierno.