" Hay que ir mucho más allá, acercarse a la palabra de Dios " dijo el padre José Brutua, quien explicó que la temporada de Cuaresma no solamente es elegir comer mariscos en reemplazo de la carne, sino que ese sacrificio que se hace sea para algún cambio en nuestras vidas.
El Padre manifestó que hay que hacer nuevos caminos y aprovechar el tiempo de la Cuaresma para preparase y eliminar todo pecado, es decir proponer en cada uno un cambio para bien.
Brutua dijo que cada religión tiene una práctica diferente durante la Cuaresma y que el hecho que se deje de hacer algo que a uno le gusta, no es dejarlo de hacer y ya, sino que hay que ofrecer una obra, un sacrificio.
FUENTE: Viola Guevara