El presidente electo de Panamá, José Raúl Mulino, delineó una estrategia enérgica para abordar la crisis migratoria en la región durante su discurso de proclamación. Enfocado en salvaguardar la integridad de la frontera panameña, Mulino anunció medidas contundentes, incluida la repatriación de aquellos que ingresen de manera irregular por la zona de Darién.
"Panamá y nuestro Darién no son simples rutas de tránsito; son nuestra frontera", subrayó Mulino con firmeza, destacando la importancia de proteger la soberanía del país. El concepto de cierre de fronteras, enfatizó, va más allá de lo físico, abarcando una dimensión filosófica que implica un compromiso total con la seguridad nacional.
Repatriación por crisis migratoria en Panamá será apegado a los derechos humanos
En este contexto, el presidente electo reiteró su compromiso con el respeto irrestricto de los derechos humanos, asegurando que cualquier proceso de repatriación se llevará a cabo con el máximo apego a estos principios fundamentales. Mulino enfatizó su determinación de poner fin a lo que denominó como la "odisea del Darién", asegurando que aquellos que ingresen de manera irregular serán devueltos a sus países de origen.
Con estas declaraciones, José Raúl Mulino deja claro su postura firme ante la crisis migratoria y su determinación de proteger la integridad territorial y la seguridad de Panamá.