BUENOS AIRES (AP). Cuando los hinchas rugen de furia y la prensa crítica, tiemblan los técnicos y peligran sus empleos.
Eso estaba ocurriendo hoy jueves, con los timoneles de Brasil, Argentina, Colombia y Venezuela, cuestionados en sus países porque no ganan o no convencen en las eliminatorias sudamericanas para el mundial de 2010.
Al técnico brasileño Dunga no lo abuchearon más porque la cancha estaba medio vacía. En el caso del argentino Alfio Basile, el colombiano Jorge Luis Pinto y el venezolano César Farías sus oídos confidentes no escucharon nada porque sus equipos jugaron fuera de casa.
Brasil igualó 0-0 en Río de Janeiro ante el colista Bolivia; Argentina empató 1-1 en Lima con el penúltimo Perú, y Colombia bailó un poco la cumbia y otra la cueca en la goleada 4-0 ante Chile, en Santiago, en todos los casos el miércoles por la octava fecha de las eliminatorias.
Un día antes, Paraguay despachó en Asunción 2-0 a Venezuela, que en puntos comparte el penúltimo lugar con Perú, aunque lo aventaja por la diferencia de goles.
"Voy a seguir trabajando", dijo Dunga. "No todo es soleado", agregó el técnico, cuya cabeza reclaman en Brasil, la cual ya tambaleaba antes de que su equipo cayera 3-0 ante Argentina en las semifinales del fútbol de los Juegos Olímpicos de Beijing, cuyo oro para colmo de males lo ganó ese odiado vecino.
"Adiós Dunga", dice el jueves diario Lance de Brasil, horas después que la torcida brasileña volviera a relamerse gritándole "¡Burro...Burro!" al cuestionado timonel, quien ya había recibido el honor de ser criticado por el presidente de su país Luiz Inacio Lula da Silva.
"Los abucheos no fueron mayores debido a que el público era poco", destacó Jornal do Brasil.
Aunque de fútbol opinan todos, el "Coco" Basile no recibió aún la distinción de ser criticado por la presidenta de su país Cristina Fernández.
Pero sí fue tocado por la varita del líder de la principal central obrera de Argentina, Hugo Moyano, quien declaró a la prensa que el esquema táctico de Basile "no nos permite lograr lo que todos queremos".
Es decir, triunfos, ya que Argentina hace cinco partidos que no gana en las eliminatorias, algo que jamás le ocurrió en este tipo de competencia.
"Es un momento difícil el que está viviendo Basile", agregó Moyano.
Tan difícil, que el diario Clarín señala el miércoles que "desde un sector cercano al propio entrenador se instaló que a Basile hay gente que lo quiere desestabilizar", es decir, despedirlo.
Como el partido ante Perú terminó entrada la madrugada argentina, no hay análisis concretos sobre el futuro de Basile. Pero días atrás, varios medios insinuaron que el final de su ciclo estaría cerca.
La misma opinión que hay en Colombia sobre Pinto, aunque en este caso su salida suena con más fuerza.
El futuro de Pinto estaría en manos de los directivos de la federación local encabezados por el presidente Luis Bedoya, quienes se reúnen al regreso de la catástrofe de Santiago.
"No me pregunten por la renuncia, pregúntenle a Bedoya", respondió Pinto luego de caída.
El diario El Tiempo dice: "Se abre el debate: ¿el técnico Pinto debe seguir? A él lo soportaban sus resultados. Los venía sacando (fuese como fuese), pero estos dos golpes (derrota con Uruguay y la humillación total en Chile) lo dejan pésimamente parado y sin argumentos, como cuando regresó del papelón en la Copa América".
"Y si no es Pinto, ¿quién: 'Bolillo' Gómez (Hernán Darío), que era el último que había perdido en Santiago (4-1) en una eliminatoria; el argentino Gustavo Alfaro, Richard Páez...?".
Farías, precisamente reemplazante de Páez en la selección de Venezuela, es otro cuestionado en su país, ya que viene de tres derrotas al hilo: 3-2 con Chile y 1-0 ante Perú, además del 2-0 con Paraguay.
"¡Que vergüenza!" destacó en su principal titular el diario deportivo Líder, tras la derrota en Asunción.
"Yo no voy a renunciar" dijo Farías, quien asumió en enero tras la renuncia de Páez y que apenas atrapó un sólo punto ante Uruguay (1-1) en Montevideo de los últimos doce en juego.
FUENTE: Agencia AP