MEXICO ( AP ). Otros once cadáveres, entre ellos una mujer, fueron hallados el miércoles en fosas descubiertas en el estado de Durango en el norte de México, aumentando el número de víctimas a 121.
La procuraduría estatal de Durango informó que los restos fueron hallados por investigadores militares que habían excavado en cuatro sitios en la capital del estado, del mismo nombre.
La investigación se realiza desde hace casi un mes en fosas que al parecer fueron abiertas por pandillas de traficantes de drogas con el objeto de deshacerse de sus víctimas.
Las tumbas de Durango son el segundo descubrimiento de ese tipo en un mes. Un total de 183 cadáveres fueron exhumados de 40 fosas en Tamaulipas, estado de la frontera norte.
El hallazgo de fosas comunes se ha acrecentado considerablemente en la violenta guerra desatada por los carteles de narcotraficantes en México, que ha cobrado la vida a más de 34.600 personas desde que el presidente Felipe Calderón emplazó miles de fuerzas de seguridad federales a fin de combatir el tráfico de estupefacientes.
La ofensiva provocó una división de los carteles del país y contribuyó a la guerra de los narcotraficantes por la tenencia de territorio.
Las autoridades del estado de Durango dijeron que el descubrimiento de fosas comunes no ha provocado una respuesta de los familiares de personas desaparecidas, quizás porque las familias sienten temor de presentarse a buscarlas.
Asimismo el miércoles, en el estado de Guerrero en la costa del Pacífico, la policía estatal dijo que había hallado el cadáver desmembrado de un hombre en cuatro bolsas plásticas en un centro comercial de Chilpancingo, la capital estatal.
La policía detectó un mensaje escrito a mano, que no fue revelado, pero que es similar a otros que dejan los narcotraficantes junto a sus víctimas.