La máxima autoridad chií de Irak, ayatolá Ali al Sistani, pidió hoy aumentar los esfuerzos de las autoridades y los líderes políticos para enfrentarse a los yihadistas en el país tras los últimos avances de estos últimos sobre el terreno.
Al Sistani señaló en un comunicado que sigue "con preocupación" lo que está pasando en la provincia septentrional de Nínive, cuya capital -Mosul- fue hoy tomada por elementos del grupo yihadista Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL) y en otras regiones iraquíes.
La máxima autoridad chií solicitó la unidad del gobierno y todos los líderes políticos, y el aumento de los esfuerzos para combatir a los terroristas y proteger a los ciudadanos.
Además, expresó su apoyo a las Fuerzas Armadas iraquíes, a las que pidió que mantengan la "solidez y paciencia" en la lucha contra el extremismo.
El EIIL tomó hoy el control de Mosul, la segunda ciudad de Irak, en un avance sin precedentes que llevó al Gobierno a pedir al Parlamento que se decrete el estado de emergencia en todo el país.
El presidente del Parlamento, Osama al Nuyaifi, denunció que las fuerzas de seguridad huyeron de algunas zonas sin presentar batalla, presas de la desorganización y el caos.
Los milicianos del EIIL lograron capturar instalaciones vitales de Nínive como el aeropuerto internacional de Mosul y el cuartel militar Al Gazalani, y asaltaron cárceles y comisarías, liberando a más de 2.700 presos, muchos de ellos acusados de terrorismo.
También tomaron varias localidades de la provincia de Kirkuk, también en el norte, y de la de Salahedín, al norte de Bagdad, donde en los últimos días han perpetrado numerosos ataques.
El objetivo del EIIL, con prácticas más extremas incluso que Al Qaeda y responsable de numerosos atentados, secuestros y ejecuciones, es crear un emirato islámico en Siria e Irak.