El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, acogió hoy con satisfacción la restitución del proceso de transición en Burkina Faso y pidió a los actores políticos en ese país que garanticen los derechos humanos de sus ciudadanos.
El presidente del Gobierno de transición, Michel Kafando, fue restituido hoy oficialmente en sus funciones tras pasar siete días apartado de su cargo por un golpe de Estado de la guardia nacional, lo que generó una fuerte tensión civil y militar.
En una declaración distribuida por su oficina de prensa, Ban ensalza los esfuerzos de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (Ecowas, en inglés) para la solución de la crisis que estalló en el país.
"La reacción del proceso de transición permitirá a Burkina Faso celebrar elecciones presidenciales y legislativas de acuerdo con la Constitución y la Carta de Transición", dice la declaración difundida por la oficina del portavoz de Ban.
También añade la necesidad de que los actores políticos voltenses "actúen con moderación y garanticen el respeto de la integridad física y los derechos humanos de todos los ciudadanos de Burkina Faso".
La guardia presidencial, cuerpo fiel al expresidente Blaise Compaoré (1987-2014), se alzó contra el Gobierno de transición el 16 de septiembre y tomó como rehenes a Kafando y a los miembros de su gabinete.
Durante los últimos siete días, el país ha vivido una fuerte tensión civil y militar con al menos diez muertos en protestas ciudadanas y un ultimátum del Ejército que dejó al país al borde de la guerra civil.