Los bomberos españoles apoyados por una veintena de aeronaves batallaban el lunes bajo un calor sofocante contra un incendio forestal que obligó a unas 1.000 personas a evacuar la zona.
Las autoridades dijeron que más de 300 bomberos con 65 vehículos fueron desplegados para combatir el fuego cerca de Valencia, a unos 350 kilómetros (220 millas) al sureste de Madrid.
El jefe de la agencia de manejo de emergencias y seguridad, José María Ángel, dijo a la prensa que las aeronaves vertían agua cada cuatro minutos.
Las temperaturas ascendían a unos 40 grados centígrados (104 grados Fahrenheit). Se ha pronosticado que las temperaturas se mantengan altas, pero las autoridades esperaban que amainen los vientos que avivaron las llamas.
Los servicios de emergencia dijeron que casi controlaron el incendio el domingo, pero que cuando las aeronaves antiincendios se retiraron tras la puesta del sol, el fuego se reavivó y se vieron obligados a ordenar la evacuación.
Las autoridades dicen sospechar que el incendio fue causado deliberadamente.
FUENTE: AP