Samuel Monroy González, de 52 años, formaba parte de la seguridad que tenía bajo su cuidado el vehículo de Transporte de Valores, que debía trasladar fondos de la Lotería Nacional de Beneficencia al Banco.
Por cuestiones de la vida, Monroy no portaba el chaleco antibala. Él nunca se imaginó que un grupo de delincuentes planeaban un gran golpe. El camión blindado portaba 70 mil balboas, en efectivo.
Los ladrones se hicieron pasar por simples transeúntes, es más uno de ellos portaba un arreglo de peluche, con el cual ocultaba su arma. Cuando los seguridad salían del edificio, los delincuentes abrieron fuego.
Monroy recibió cuatro disparos en el pecho, su compañero Bartolo Morán también resultó herido. Al finalizar, el intercambio de disparos en el carro blindado ambos heridos fueron trasladados al Hospital Santo Tomás, donde Monroy perdió la vida.
Él tenía 15 años de trabajar en esta empresa de Transportes de Valores. Hoy su familia llora su pérdida y exige justicia.