Por los corrillos se habla de las posibles presiones que estuviera recibiendo Eduardo Valdés Escoffery, magistrado del Tribunal Electoral, para renunciar al cargo. Al respecto existe una preocupación en varios sectores, por lo menos el exmagistrado de esta institución, Guillermo Márquez Amado, es uno de ellos.
Márquez resaltó la necesidad de que el Tribunal Electoral sea absolutamente independiente, especialmente por su condición de cuarto poder dentro del Estado. Por esa misma razón, hay que protegerlo para evitar que ningún otro Órgano del Estado tome el control, dijo el exmagistrado.
FUENTE: Kathyria Caicedo