Cada día se hace más evidente la intolerancia. Una inspectora o (chequeadora) de un Metro bus como popularmente se le conoce perdió los estribos con una pasajera que realizaba un reclamo. Tanto fue así que se fueron a los puños, en medio de los gritos de varios pasajeros.
Las quejas y reclamos de los usuarios del transporte público están terminando en agresiones constantes.
FUENTE: REDACCIÓN INTERNET