Con 60 puntos Liverpool es quinto y están a cuatro del Chelsea, cuarto -última posición de Champions-, con un partido más por jugar, el domingo en el estadio del descendido West Bromwich Albion.
De nuevo fue lo extradeportivo lo que dominó este clásico del fútbol inglés, programado inicialmente el 3 de mayo pero que tuvo que aplazarse debido a que seguidores del United invadieron el césped para protestar contra los propietarios, después de que el club se hubiera adherido y rápidamente borrado del proyecto de la Superliga europea.
Este jueves, con un importante dispositivo de seguridad, el bus que transportaba a los jugadores del Liverpool solo llegó una hora antes del partido, por una puerta trasera.
Los jugadores del United habían acudido muy pronto a Old Trafford.
Marcado por el ruido de un helicóptero en sus primeros minutos, el Liverpool aprovechó la baja de Harry Maguire en la defensa local.
Pero primero habían marcado los Reds Devils, con el habitual Bruno Fernandes (10). Diogo Jota (34) y Roberto Firmino, al que abandonó en el marcaje Paul Pogba, dieron ventaja a los Reds (45+3).
Luego llegó el doblete de Firmino (47) y el tanto de Mohamed Salah (90) para Liverpool.
En medio Marcus Rashford había reducido la diferencia (3-2) en el 68.
Además se disputó un partido aplazado de la 19ª jornada entre el Aston Villa (11º) y el Everton (8º), que finalizó 0-0.