Al menos tres personas murieron como consecuencia de las fuertes lluvias registradas hoy en el estado brasileño de Espírito Santo (centro-este), informaron hoy fuentes oficiales.
Más de 18.000 personas se vieron obligadas a abandonar sus casas y alrededor de 2.000 familias fueron evacuadas y trasladadas a albergues ofrecidos por el gobierno local, según el boletín divulgado por la Defensa Civil.
Las lluvias inundaron áreas de diferentes municipios y causaron numerosos desperfectos. De acuerdo con las autoridades, más de 3.000 edificios fueron dañados.
Asimismo, la Secretaria Nacional de Defensa Civil emitió varias alertas por riesgo de inundaciones y deslizamiento de tierras en varios municipios con el objetivo de evitar más víctimas.